(Aeronoticias).- Después de la pataleta que protagonizó el presidente chileno, Sebastián Piñera, pretendiendo ir contra la historia para afirmar que el triángulo terrestre (3,7 hectáreas) que fija los límites entre su país y el Perú, se encuentra en territorio chileno, ahora su canciller, Alfredo Moreno, anuncia que este caso “ se verá más adelante”.
Es decir, sopla la pluma olímpicamente para que esta caiga sobre el escritorio de la virtual gobernante de ese país, Michele Bachelet, quien asumirá el mando dentro de 15 días, y se encargue del problema que ha tratado de enredar su antecesor, quien de todas maneras sale chamuscado.
Por otro lado es sorprendente que Chile, país que se jacta de ser puntual cumplidor de los tratados internacionales, pretenda desconocer el Tratado de Lima, suscrito por sus representantes diplomáticos el 3 de Junio de 1929, documento que fija clara y rotundamente que el de inicio de la frontera terrestre está marcado en el lugar denominado Concordia.
Justamente, así lo reconoció hidalgamente el veterano diplomático chileno, José Miguel Barros Franco, en carta que publicó el diario santiaguino El Mercurio el 22 del presente, al día siguiente que La Moneda remitiera su carta de protesta a Torre Tagle, de lo cual Aeronoticias da cuenta en esta misma edición.
