(Aeronoticias).- La Feria Aeronáutica de Le Bourget, en las afueras de París, se inauguró hoy con las participación de los dos principales fabricantes de aviones comerciales, Airbus y Boeing y de las principales aerolíneas de cada continente.
Airbus ha aprovechado el evento para anunciar varias decenas de pedidos, con una apuesta fuerte por el A-320 Neo, la versión mejorada de su avión de pasillo único más vendido. Un modelo que entrará en servicio en el último trimestre de 2015 y que promete una mejora respecto a la versión tradicional.
De esta forma, la filial de leasing aéreo de General Electric anunció un pedido de 60 nuevos aviones de Airbus, con un valor a precio de catalogo de 5.100 millones de dólares. Además, la aerolínea escandinava SAS ha encargado 30 unidades adicionales, por valor de unos 2.400 millones de dólares.
Boeing, por su parte, ha renunciado a aclarar cómo va a hacer frente al A-320 Neo de su rival hasta finales de año. Entonces desvelará si decide imitar a Airbus y remotorizar su actual 737 o si, definitivamente, opta por lanzar un avión totalmente nuevo para 2019-2020, que supondrá un salto cualitativo para la industria.
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El grupo estadounidense anunció que Qatar Airways había cerrado otro encargo por seis 777-300ER, con valor a precios de catálogo de 1.700 millones de dólares. ALC también ha cerrado un acuerdo para la compra de hasta 33 aviones de Boeing: 14 pedidos en firme y cuatro opciones del 737-800, cinco del 777-300ER y cuatro del nuevo 787.
