(Aeronoticias).- Aunque parezca insólito, hispanoamericanos que ya consiguieron la residencia en los Estados Unidos o que ostentan la ciudadanía por nacionalización en este país, también se oponen ahora a la llegada de nuevos inmigrantes poniéndose del lado de la absurda e inhumana ley del Estado de Arizona que ha endurecido el trato a los llamados “ilegales” que llegan procedentes de las patrias que aquellos también abandonaron.
Esta ingrata paradoja fue puesta en evidencia por el escritor peruano Gregorio Martínez en comunicación telefónica desde el Estado de Virginia, Estados Unidos, a RPP, dentro de un informe sobre el drama que se cierne sobre muchos peruanos y otros latinoamericanos por la aplicación de esa ley federal, inspirada en la falsa premisa que pretende considerar al inmigrante latinoamericano como un potencial enemigo de la sociedad norteamericana por quitarle puestos de trabajo a los estadounidenses o por ser un futuro delincuente.
Martínez dijo que los norteamericanos se olvidan que sus ancestros proceden de países de diferentes partes del mundo que llegaron a lo que ahora es Estados Unidos, forjando una gran nación mediante su trabajo, como también han ayudado y siguen ayudando, con su sudor los latinoamericanos.
