Dentro de un consenso de fe en las bondades del libre mercado y sobre las medidas para enfrentar la crisis, el Presidente del Perú, Alan García, cerró ayer la cumbre de líderes de APEC en la que participaron 21 líderes de los diversos países del mundo que se dieron cita en Lima, para debatir las políticas de comercio e inversiones, que les permitan a sus economías enfrentar el éxito que reclama hoy una sociedad internacional afectada por graves problemas económicos, además de conflictos sociales y políticos de larga data.
La confianza en el futuro fue el marco en el que se presentó la declaración de Lima, en donde los dignatarios vestidos con ponchos de lana de alpaca, dentro de un marco, en el que el Presidente del Perú señaló, que es obligación de los líderes “señalarle a la humanidad metas, plazos, transmitir confianza, convicción y fe”.
En la declaración de Lima, se trató la integración regional, la seguridad alimentaría, la responsabilidad social corporativa, la lucha contra la corrupción, el fortalecimiento de la cooperación, la lucha contra el terrorismo, la gestión de los desastres y el cambio climático.
