(Aeronoticias).- Un avión ruso de la aerolínea Alrosa con 81 ocupantes realizó un aterrizaje forzoso luego que todo su sistema fallara. Milagrosamente, todas las personas que iban a bordo resultaron ilesos.
La aeronave transportaba 72 pasajeros y nueve tripulantes desde la ciudad de Poliarni a Moscú, cuando de manera repentina fallaron los sistemas de navegación, de radiocomunicación y el sistema eléctrico del avión a una altura de 10.000 metros.
La tripulación decidió aterrizar a pesar que ninguno de los motores funcionaba. Se dirigieron al aeropuerto más cercano, el de Izhma, que no está equipado para recibir aviones de gran tamaño como el TU-154, pues su pista es muy corta.
Al tercer intento, el avión logró aterrizar. No obstante, la velocidad de la aeronave era más alta de lo previsto, porque los flaps no estaban desplegados por el fallo del sistema eléctrico. El aparato se salió de la pista y se detuvo en un bosque tras recorrer unos 200 metros.
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«Ya está trabajando una comisión especial que investiga las causas del incidente. Después que termine la investigación es muy posible que los dos pilotos sean condecorados por su valor, heroísmo y coraje», comentó el portavoz de la Agencia Federal de Transporte Aéreo.
