El primer ministro italiano Silvio Berlusconi se manifestó ayer con humor ante el escándalo que lo envuelve y confió: "Los italianos me quieren como soy: generoso, honesto y fiable, por eso no cambiaré", indicó en declaraciones tomadas por diarios que siguen divulgando sus escandalosas historias, luego del escándalo por las fiestas en sus residencias con chicas ligeras de ropa.
El político de 72 años reconoció que quizá tuvo algún que otro invitado "equivocado", pero nunca ocurrió algo inmoral, por lo que, "Papi Chulo", -como la llama la casi adolescente Noemí Letizia-, dice ser "honesto y fiable", y anticipó que no cambiará.
Berlusconi cambió de táctica y volvió a confiar en su encanto, contra su actitud de hace unos días, cuando se mostraba indignado por los titulares negativos que despertó, por esto, en cambio de sus actitudes previas, hoy el premier italiano se mostró preocupado sobre el boicot convocado hace unos días por cuatro científicas italianas, quienes llamaron a que las primeras damas de los Estados del Grupo de los Ocho (G8) no acudan a la cumbre que celebra el organismo en julio en Italia.
Al respecto sostuvo: "¿Qué harían allá sin mujeres? ¿Son homosexuales? La próxima vez les traeré un par de show girls; mayores de edad, claro", bromeó Berlusconi con los trabajadores de la construcción que preparaban la cumbre en L`Aguila, en el centro del país.
Las científicas de la universidad de Milán, Perugia, Padua y Ferrara justificaron su desacostumbrada acción de protesta alegando "el discurso inaceptablemente sexista" de Berlusconi, que mina "la dignidad de todas las mujeres". El llamamiento de boicot fue firmado por 6.500 mujeres, según medios italianos.
En la cumbre del G8 en Italia, que tendrá lugar del 8 al 10 de julio, se espera la presencia de Michelle Obama y Carla Sarkozy, entre otras.
Aeronoticias considera que una investigación exhaustiva es necesaria, además sería subrayable –hacia su nación más que para cualquier otro pueblo extranjero- que Berlusconi se retractara de su actitud despreocupada respecto a las acusaciones que se le imputan, debido a que la prostitución, y la malversación de fondos son temas muy serios, y deben ser tomados como tal por los gobernantes, y por cualquiera que sea acusado, considerando que el premier es la cabeza de la nación y como tal debería eximir sus conductas erróneas.
