(Aeronoticias).- Una larga agonía tuvo que pasar el club cusqueño para poder quedarse en el fútbol de la primera división del Perú. Esto es una lección para sus dirigentes comandados por Juvenal Silva para que no cometan los gruesos errores que han venido cometiendo desde ya hace mucho tiempo atrás.
Cienciano derrotó hoy al Alianza Altletico por 2 a 1 en un partido por la última fecha del torneo Descentralizado y, con este resultado, salvó la categoría. Asimismo, Alianza Atlético, pese a la derrota, también se salvó de ir a la baja. El estadio Garcilaso de la Vega fue una verdadera fiesta de la ‘Furia Roja’- upa upa papá.
El público sí que atendió el llamado de los jugadores. Así que, a estadio lleno, Cienciano salió a llevarse la victoria, los 3 puntos y machacar a su rival desde el arranque. No obstante, en los primeros minutos, fue presa de ansiedad y falló varias ocasiones claras de gol frente al arco rival.
Cuando un Juan Carlos Mariño inspirado abrió los ojos, todo fue más fácil para los rojos. Tras un gran pase suyo y apoyo de Luis Ojeda, Renzo Reaños abrió la cuenta a los 31 minutos. La fiesta, literalmente, se instaló en el Cusco. Pero el festejo tuvo que detenerse ya que Israel Kahn decretó el empate a los 50 minutos.
Con la igualdad ambos equipos no descendían. Sin embargo, la consigna cusqueña era ganar y los jugadores no pararon hasta conseguirlo. El ‘Burrito’Mariño, quién más, sacó un disparo desde fuera del área a los 56 minutos y selló cifras en el encuentro.
Como era de esperarse, luego del pitazo final, Sergio Ibarra explotó en llanto y junto a él comenzaron los festejos de su plantel por la hazaña conseguido en un año bastante malo en la historia del club cusqueño.
Cuando un Juan Carlos Mariño inspirado abrió los ojos, todo fue más fácil para los rojos. Tras un gran pase suyo y apoyo de Luis Ojeda, Renzo Reaños abrió la cuenta a los 31 minutos. La fiesta, literalmente, se instaló en el Cusco. Pero el festejo tuvo que detenerse ya que Israel Kahn decretó el empate a los 50 minutos.
Con la igualdad ambos equipos no descendían. Sin embargo, la consigna cusqueña era ganar y los jugadores no pararon hasta conseguirlo. El ‘Burrito’Mariño, quién más, sacó un disparo desde fuera del área a los 56 minutos y selló cifras en el encuentro.
Como era de esperarse, luego del pitazo final, Sergio Ibarra explotó en llanto y junto a él comenzaron los festejos de su plantel por la hazaña conseguido en un año bastante malo en la historia del club cusqueño.
