El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, rechazó hoy amenazas de comerciantes para incrementar el precio de los productos en respuesta a las recientes medidas económicas anunciadas por el gobierno. El viernes, el mandatario anunció una devaluación del bolívar con dos precios oficiales frente al dólar.
El primero, a 2,60 por dólar, para un reducido número de rubros entre ellos los alimentos y las importaciones del sector público. El otro precio es de 4,30 bolívares por dolar para el resto de la actividad económica venezolana. Dicha paridad duplicó la cotización anterior de 2,15 bolívares por dólar y que permaneció vigente durante cinco años.
En respuesta a la depreciación de la moneda, grupos de oposición censuraron la medida y argumentaron que los precios subirán el doble. Algunos medios publicaron este domingo fotografías de filas de clientes en las tiendas para aprovechar las ofertas.
Durante la transmisión de su programa dominical «Aló, presidente», el primero del año, Chávez dijo que no hay razón para un aumento de precios e instó a la población y a la Guardia Nacional a evitar la especulación. El presidente llamó a los comerciantes a no aumentar sin razón los precios y dijo que se intervendrán los establecimientos de producirse una ola especulativa.
Chávez dedicó su primer programa del año a conmemorar los 150 años de la muerte del general Ezequiel Zamora, militar y político venezolano. Protagonista de la Guerra Federal (1859-1863) que propugnaba una reforma agraria a favor de los campesinos, Zamora fue asesinado el 10 de enero de 1860 en Cojedes, región occidental y uno de los 23 estados del país.
Chávez transmitió su programa dominical «Aló, Presidente», con la asistencia autoridades locales y numerosos dirigentes regionales, desde una plantación de cinco mil hectáreas para el cultivos de girasol, a donde llegó conduciendo un tractor, acompañado del ministro de Agricultura, Elías Jaua.
En 2009 se sembraron en Venezuela 70.000 hectáreas de girasol, una oleaginosa para elaborar aceite para el consumo humano, con una producción de 35.500 toneladas, lo que representó un ahorro de 30 millones de dólares en importaciones.
Jaua aseguró que las medidas económicas anunciadas el viernes por Chávez incentivarán la producción nacional y negó que representen un golpe contra el pueblo.
