(Aeronoticias).-Quién no ha llegado alguna vez tarde a su centro de trabajo, sin embargo hay algunos trabajadores que no tienen a la puntualidad entre uno de sus virtudes precisamente. En
Estados Unidos un 26% de los trabajadores admitió llegar tarde al menos una vez al mes a su trabajo y un 16% una vez por semana, según una encuesta realizada a los gerentes de varias empresas por el portal laboral CareerBuilder.
Como parte de la encuesta, el portal pidió a los jefes que compartieran las excusas más insólitas de sus trabajadores. Estas son algunas de ella:
Máquina de diarios: Un empleado alegó que se le cayó la cartera dentro de una máquina para comprar diarios. No la pudo recuperar por no tener monedas. Estaban dentro.
Zapatos equivocados: Otro trabajador dijo que salió por error con los zapatos de su compañero de cuarto. Tuvo que volver y por eso llegó tarde.
Llaves congeladas: Un hombre dijo que su esposa, enojada, le había puesto las llaves del auto en un vaso con agua y lo había congelado en la nevera.
Nivel de alcoholemia: Un trabajador alegó que su auto no arrancó porque un aparato para medir sus niveles de alcoholemia indicaba que estaba ebrio y no lo dejó encenderlo.
Corte de cabello: Un trabajador le dijo a su jefe que intentó cortarse el cabello él mismo, pero la máquina dejó de funcionar y tuvo que esperar a que abrieran la peluquería.
Ataque de oso: Un empleado dijo que llegó tarde porque su auto fue atacado por un oso. Lo insólito fue que mostró fotografías del hecho como prueba.
Trabajo equivocado: Un trabajador dijo que se fue por equivocación a su anterior empleo y que por eso llegó tarde.
Ayudar a una embarazada: Un hombre dijo haber ayudado a dar a luz a una mujer en una carretera