La policía desconoce por qué fue atacada a la familia, pero algunos activistas temen que la población hispana de la ciudad comience a ser objeto de abusos de parte de personas que aparentan ser autoridades. La policía ha dicho que la población ha colaborado con pistas e información que podrían llevar al bebé, pero el temor sobre su seguridad aumenta cada día.
«No sabemos si la persona que se llevó al niño sabe cómo cuidar de un bebé», dijo el vocero de la policía Don Aaron. La mujer no dijo que se quería llevar al bebé, según Gurrola. «Ella le dijo que era una agente de inmigración y que la iba a arrestar», señaló el primo de Gurrola, que actuó como un intérprete.
Gurrola recibió varias puñaladas en la nuca y el pecho. Tuvo que ser hospitalizada, pero recibió el alta el jueves. La policía indicó que Gurrola ha estado en Nashville posiblemente unos 10 años, pero su estatus migratorio no está claro. Aron aclaró que la situación migratoria y la ciudadanía de Gurrola no eran relevantes para la investigación.
Para Yuri Cunza, presidente de la Cámara de Cómercio Hispana de la Zona de Nashville y editor del diario en español La Noticia, es importante que los inmigrantes aprendan a confiar en las autoridades estadounidenses, pues los criminales pueden aprovecharse de su temor a ser deportados y a la policía para cometer abusos.