(Aeronoticias).- Cuando Lionel Messi salió frente a los medios para dar su apoyo a Madrid 2020 y terminara lanzando una publicidad en favor de Estambul (veladamente a favor de los Juegos Olímpicos en Turquía), quizá no se imaginara el abrazo del oso que resultó para estos candidatos, hoy perdedores para ser sede de este evento deportivo.
El sí fue para los japoneses, en una participación electoral que dejó por los suelos a la candidata castellana luego de perder también frente a Turquía. ¿Por qué sí al sushi y no a la paella? Según el diario Mundo Deportivo, existían razones como para desacreditar una hipotética victoria de España.
a. Problemas en el interior/exterior: Los problemas que carga con Reino Unido por la zona de Gibraltar -la cual cedió España siglos atrás por una guerra-, al igual que la crisis en la que está inmersa la nación ibérica.
b. Operación Puerto: La más grave de todas las razones fue el cuestionamiento al proceso judicial en el que deportistas españoles realizaban dopaje, proceso judicial con sentencias de risa, como para cumplir el protocolo. Cuando las autoridades olímpicas preguntaron por el caso, olímpicamente los emisarios españoles se pasearon por la pregunta y se concentraron en, sin querer, hundir las probabilidades de su país.
c. Alternancia: Las sedes de los Juegos Olímpicos varían de continente a continente durante la realización de este evento. Tocó Río de Janeiro (América), Londres (Europa) y Pekín (Asia), así que el turno era de los asiáticos.
d. Económicamente…: Si a los japoneses les hubieran dicho «queremos el dinero que costará en remozar su ciudad para los Juegos», habría demorado unas horas en hacer llegar en metálico ese dinero, mientras que los españoles habrían demorado más tiempo para ello: El fondo de contingencia nipón les valió mucho.
Con información de Mundo Deportivo.
