(Aeronoticias) ¿Bastarán las excusas y promesas a que se vio obligado a ofrecer ante las autoridades de la Comunidad Económica Europea, el presidente Ollanta Humala, en torno al pasaporte electrónico porque Perú NO ha cumplido como sí lo ha hecho Colombia en su emisión?
Lo cierto, patético, evidente y denunciado desde meses atrás fue que el requisito para la exención de la visa Schengen, el documento biométrico, NO existe en Perú y tampoco hay fecha cierta para su emisión, precio, detalles y características. El ministro de Economía, Alonso Segura “imagina” que se hará en el primer trimestre del 2016, afirmación poco seria frente a un chasco de nuestra política internacional.
Pero, y así lo hemos venido advirtiendo desde tiempo atrás, hay mucho mar de fondo. El contrato de buena pro firmado por Migraciones, en nombre del Estado peruano y Gemalto-Imprimerie Nationale establece que la entrega de los biométricos se hará en el plazo de ¡8 meses!, es decir en julio del 2016. Nadie podía llamarse a engaño con esta cláusula de un convenio que ¡jamás! debió haber sido suscrito. Adjuntamos texto completo del acuerdo.
En el referido contrato se habla – y se reitera en muchas oportunidades- que se lo hace de acuerdo a la propuesta técnica. Pero ¡en Perú no está la propuesta técnica! No ha sido publicada y es un secreto guardado por Migraciones y OACI-ICAO en Montreal, Canadá, sede de ese organismo, bajo siete llaves. Cuando se inquirió por el documento la respuesta ha sido vaga, imprecisa y hasta malcriada porque -dicen- que no tienen que dar cuentas a nadie pues se rigen por sus propias reglas. ¿Se pagó 1 millón de dólares por esta desfachatez?
Ni siquiera las expresiones de Federica Mogherini, autoridad de la Comunidad Europea, que pretenden “dar tranquilidad” al pueblo peruano son suficientes como para eludir el tema de fondo: la empresa Gemalto y sus consorciadas Imprimerie Nationale -también francesa- y la nacional Segres Systec S.A. de Nicolás Kecskemethy vinculado a negocios millonarios en armas a Vladimiro Montesinos, recién están en el prototipo -dicen ellos- y nadie sabe el precio ni los detalles de la carta fianza que debió haber depositado la firma ganadora de la buena pro.
¿Será cierto que Migraciones ya soltó un primer cheque cuantioso por un porcentaje del contrato a Gemalto? Si así fuere, en Perú nos ocurre algo muy curioso: ¡se paga por lo que no se tiene ni obtiene!
A propósito de la entidad titular del fiasco, Migraciones, ¿alguien sabe el paradero de su titular, el abogado Boris Potozén Bracco? Su ausencia es más o menos visible y que el embajador de Francia en Perú, Fabrice Mauriés se presentara dos veces en Radio Programas del Perú a hablar sobre el pasaporte electrónico, no exime al burócrata de dar la cara porque ¡ese es su trabajo!
En Colombia hay fiesta y el titular de su gobierno, Juan Manuel Santos, está en Bruselas, acompañando una justa celebración. Aquí los yerros múltiples, la torpeza de una licitación “conducida” por OACI-ICAO que sabía del tema y procedimientos tanto como yo sobre la cura del cáncer, produjo desazón. Y hoy constatamos que teníamos alguna verdad en los textos periodísticos entregados al público desde hace meses.
Todo indica que el presidente Humala no careció de soluciones para evitar el papelón con la Comunidad Económica Europea. Verbi gracia ¿por causa de qué no apeló a la experiencia de la empresa colombiana que hizo los pasaportes allá? Están cerca, debieron haber conversado, son latinos y juntos comenzamos esta negociación con Europa. Entonces ¿por qué se falló tan clamorosamente?
Es de notarse que los medios de comunicación casi no dieron espacio al tema de los pasaportes electrónicos, se ciñeron a los boletines de la Superintendencia Nacional de Migraciones y a pesar de las advertencias, hacían caso omiso de las mismas. ¿Seguirán en ese papel abominable?
Informar, que es la razón fundamental del periodismo, es un requisito ineludible. Defender el interés público por encima de parroquias o preferencias y si las hay, denunciarlas, otra misión brillante y obligatoria. Hay mucho pan por rebanar en este tema y por eso, con humildad e investigación amplia, siempre reitero los títulos anteriores. Acaso incurriendo en su lectura se encuentre detalles que atisbaban el fracaso que estamos contemplando con tristeza.
¿No es hora, presidente Humala, que haga una reingeniería en Migraciones y mande a descansar a los que le han puesto en esta indecorosa encrucijada?
El próximo gobierno y Congreso deberán actuar e investigar a los fautores del estropicio. Sin duda alguna.