(Aeronoticias).- «El espionaje está instalado también en el ciberespacio, donde hackers de toda naturaleza y condición, y no precisamente románticos del software libre, se dedican a entrar en empresas, entidades financieras y organismos varios para escudriñar y apropiarse de sus secretos», de esta manera el diario español El País describía a los intrusos informáticos dedicados a obtener información de todo tipo para cumplir sus fines.
Desde informaciones secretas militares, industriales o científicas, el medio señala que le serviría para «la potencia asiática emergente» (China) estos datos. Y añade que este espionaje en el campo de la cibernética ha iniciado una ciberguerra fría que enfrenta a Estados Unidos y China.
«Es fácil imaginar que sus intereses no se limitan a obtener el enigma mejor guardado del capitalismo, la fórmula de la Coca-Cola», comentó. Luego prosigue que las técnicas que la superpotencia norteamericana ha usado contra Irán le ha servido en contra al tener una sociedad tan dependiente de la informática. «Ya es demasiado tarde para ponerle puertas al campo. Cuando el Estado es el hacker, mal asunto».
