Añadió que ahora que el gobierno de Chile está en manos del empresario Sebastián Piñera era de esperar que las relaciones entre ambos países experimenten un refrescante cambio, teniendo en cuenta además que existen hasta tres palancas que ayudaran a fortalecer este cambio: el comercio, la inversión y el movimiento migratorio que es cada vez más caudaloso de un lado al otro.
Raffo, dijo también que si los líderes chilenos y peruanos, que dirigen el comercio y las exportaciones en sus respectivos países logran entenderse, podrán movilizar toneladas de productos alimenticios, como la palta de primera calidad, por ejemplo, hacia los grandes mercados del Asia y de Europa, pues juntos están en condiciones de abastecerlos durante casi todo el año.