(Aeronoticias) La industria aérea mundial sufrirá este año un retroceso financiero, ya que su beneficio será un 2,3 % menor que en 2016, pero dará un salto importante en 2018 con un avance de dos dígitos, según las previsiones económicas presentadas hoy por la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA).
El sector obtendrá este año un beneficio de 34.500 millones de dólares, lo que supone un descenso frente a los 35.300 millones de dólares de un año antes y un golpe para la industria.
El dato para 2017 no es bueno, pero es mejor que los 31.400 millones de dólares augurados en junio pasado por la organización, que representa a una 275 aerolíneas
No obstante, el sector encara un 2018 positivo, ya que la industria obtendrá un beneficio de 38.400 millones de dólares, lo que supone un 11,3 % más frente al actual ejercicio.
La IATA considera que una fuerte demanda, la eficiencia de la industria aérea y unos pagos de intereses más reducidos “ayudarán a las aerolíneas a mejorar su beneficio neto en 2018, pese a unos costes crecientes”.
La evolución de los ingresos de la industria es mejor que la de los beneficios, ya que pasarán de unos 709.000 millones de dólares en 2016 a 754.000 millones este año y a 824.000 millones de dólares el próximo ejercicio, lo que supondrá un 9,4 % más.
El próximo año será el cuarto año consecutivo de beneficios sostenibles, con un retorno sobre el capital invertido del 9,4 %, lo que supera el coste medio del capital (7,4 %).
No obstante, tras bajar el margen operativo sobre los beneficios en 2017 -del 9,2 % en 2016 al 8,3 %- este indicador empeorará aún más en 2018, al descender hasta el 8,1 %.
Evolución similar experimenta el margen neto, ya que descenderá del 5 % en 2016 al 4,6 % este año antes de rebotar una décima el próximo ejercicio.
El consejero delegado de la IATA, Alexandre de Juniac, consideró hoy que son “buenos los tiempos” para la industria aérea global, dado que la seguridad es sólida, las aerolíneas consiguen unos “niveles de beneficios sostenibles”, se abren más rutas y hay “más personas que nunca” viajando con las aerolíneas.
De hecho, el número de pasajeros transportados experimentará una buena evolución, al aumentar de 3.800 millones en 2016 a 4.100 millones este año, y crecer en 2018 hasta 4.300 millones.
El tráfico ha aumentado una décima, hasta el 7,5 % en 2017 en comparación con el año anterior, pero se volverá a ralentizar el próximo ejercicio, con un incremento del 6 %.
La capacidad a su vez seguirá bajando, ya que este año el crecimiento será del 6,3 % frente al 7,5 % del año anterior, y en 2018 será ya únicamente del 5,7 %.
Con todo, y lo que interesa a las aerolíneas, el beneficio neto medio por pasajero transportado se situará en 2018 en 8,90 dólares, frente a los 8,45 dólares en 2017.
Eso sí, ambas cifras son peores que los 9,26 dólares registrados el año pasado.
En cuanto a la demanda del transporte de mercancía, los volúmenes aumentarán un 4,5 % en 2018, un porcentaje muy inferior al avance del 9,3 % registrado en 2017, año en el que las empresas necesitaron renovar rápidamente sus inventarios para hacer frente a una demanda inesperadamente fuerte, indicó la IATA.
Por regiones, Norteamérica será la región con los beneficios más fuertes en 2018, ya que ganará 16.400 millones de dólares el año próximo frente a los 15.600 millones de este ejercicio.
Las aerolíneas norteamericanas han generado más de la mitad de los beneficios de la industria global en los últimos tres años.
Las compañías europeas, a su vez, registrarán un beneficio neto de 11.500 millones de dólares en 2018, por encima de los 9.800 millones que se prevé obtendrán este año.
Las aerolíneas se benefician de una fuerte recuperación económica en los mercados domésticos, han podido superar el impacto de los atentados terroristas en 2016 y han experimentado cierta consolidación tras el cierre de varias compañías regionales.
Pero De Juniac advirtió, entre otras cosas, de la incertidumbre que causa el “brexit”, ya que pidió a la Unión Europea (UE) y al Reino Unido tomen “medidas urgentes para negociar una provisión para la conectividad” posterior a la salida de ese país del bloque comunitario.
En Latinoamérica, el sector aumentará en 2018 su beneficio en 200 millones de dólares, hasta 900 millones, tras registrar un 2017 plano y repetir las ganancias de 700 millones del año precedente.
La región se beneficiará de la recuperación moderada en la economía brasileña, un crecimiento razonable en México y un dólar estadounidense más débil durante el último año.
Fuente: EFE