Que Air Comer continúe su línea de crecimiento seria uno de los objetivos de Marsans, respecto a la larga distancia de vuelos transoceánicos que cubran los principales destinos americanos, lo que ayudará a la ampliación de la flota de la aerolínea a la que cada mes se suma una nueva unidad de Airbus A-330, modelo con capacidad de operar el largo radio. Respecto a esto, se dijo que la apuesta de Marsans es “muy clara” y la compañía prevé a las rutas existentes nuevas conexiones, entre ellas a Estados Unidos y México, para que Air Comet se convierta en "la gran alternativa a Iberia, con calidad y un precio competitivo".
Ya que Air Comet se centra en vuelos de larga distancia, el grupo necesitará alimentar los vuelos transatlánticos que ofrece con más pasajeros procedentes de otras ciudades españolas y europeas. En este sentido, Pascual explicó que esas conexiones pueden realizarse a través de la propia Air Comet, sin la necesidad de adquisiciones de alguna otra línea aérea. "Todo cabe en un futuro", apuntó. Aunque el empresario no descartó interés por la adquisición de Spanair, compañía de la que fuera fundador y que opera en el segmento doméstico y de media distancia, insistió en que "en este momento no hay nada, pero hay que esperar y ver".
Sin embargo, fuentes cercanas a la empresa controlada por SAS reconocieron que un fondo de inversión de Gran Bretaña estaría por realizar una oferta que los suecos tienen mucho interés en aceptar. En cuanto a las posible desinversiones, respecto al segmento de agencias de viajes, al que el grupo tiene un planteamiento "muy sólido", "para que prescindamos de ellas, en un entorno que para otros es mucho, tendría que ser por un valor justo" y si esa confluencia no se produce, Pascual descartó la desinversión. "Nosotros tenemos muy claro que hay que estar en los sectores de mayor oportunidad", como el transporte aéreo y el hotelero que pretende reforzar el grupo, aunque no "en detrimento" de otros negocios, concluyó.