La certificación LEED es reconocida internacionalmente como independiente y se otorga a aquellos edificios cuyo diseño, construcción y operación los hace edificios amigables con el medio ambiente y de alto rendimiento.
Así, el certificado reconoce el compromiso del Tambo del Inka con el desarrollo sustentable, eficiencia en el uso del agua, ahorro de energía, uso de materiales, calidad ambiental interior e innovación en tecnología y procesamiento.
El resort cuenta con su propia planta de tratamiento de aguas. También ha implementado un programa de reciclaje, que alienta a los huéspedes a reutilizar sus toallas, y que promueve el uso de bicicletas y autos compartidos, como medio de transporte para el personal del hotel.
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La distinción de liderazgo en diseño energético y ambiental es otorgada por el US Green Building Council (Consejo de Edificación Sustentable de los Estados Unidos).