(Aeronoticias).- JetBlue Airways dijo que se convertirá en la primera gran aerolínea estadounidense en compensar las emisiones de todos sus vuelos nacionales y aspira a alcanzar la neutralidad en carbono en julio, a medida que aumenta la presión sobre el sector por parte de los activistas del cambio climático.
La operadora también comenzará a utilizar combustible sostenible en los vuelos desde el Aeropuerto Internacional de San Francisco, dijo el lunes la aerolínea con sede en Nueva York.
JetBlue no quiso revelar el coste del programa de compensación, pero dijo que no aumentará las tarifas aéreas como resultado. La aerolínea produce alrededor de 8 millones de toneladas métricas de emisiones de dióxido de carbono anualmente y está trabajando en un plan para compensar los vuelos internacionales, dijo Sophia Mendelsohn, directora de sostenibilidad de JetBlue.
La aerolínea sigue los pasos de EasyJet Plc, la segunda mayor operadora de Europa, que en noviembre anunció que se convertiría en la primera aerolínea en compensar las emisiones de carbono de sus vuelos.
A medida que aumentan las preocupaciones sobre el papel de la industria en el cambio climático, el volumen de pasajeros que toman vuelos nacionales ha disminuido en Alemania y Suecia, donde la activista adolescente Greta Thunberg ha liderado una campaña contra los viajes aéreos.
El máximo ejecutivo de JetBlue, Robin Hayes, dijo que el programa de su aerolínea no es una reacción a esa creciente crítica.
“Esto es parte de un compromiso a largo plazo que nosotros y la industria tenemos que tener para reflejar la realidad climática en la que nos encontramos”, dijo en una entrevista. “La aviación tiene un papel central e importante que desempeñar, y debe asegurarse de que se está preparando para el nuevo clima en el que estamos operando”.
JetBlue obtendrá créditos de carbono al invertir en proyectos que protejan los bosques de la destrucción; al desarrollar parques solares y eólicos en lugar de carbón, diésel o petróleo para generar energía; y capturar la producción de metano en los vertederos, que se puede convertir en una fuente de energía renovable.
La aerolínea dijo que su inversión es un costo del negocio, aunque señala que es probable que el gasto de las compensaciones de carbono aumente con la demanda. “Al comprarlos ahora, estamos protegiéndonos ostensiblemente contra el aumento de los precios del CO2”, dijo Mendelsohn, jefa de sostenibilidad. Otros operadores estadounidenses compran compensaciones de manera más limitada.
Alzas y bajas
JetBlue está trabajando con los consultores de sostenibilidad EcoAct y South Pole, así como con Carbonfund.org Foundation, una organización sin fines de lucro que ha financiado proyectos de reducción de carbono y plantación de árboles en más de 40 estados y 20 países.
“Hemos puesto una cantidad increíble de rigor para asegurarnos de que sean reales, legítimos, auditables, rastreables”, dijo Mendelsohn. “Seleccionamos un socio de compensación de carbono con una reputación a largo plazo que ha sobrevivido a las tormentas de compensación de carbono”.
Si bien los defensores del medio ambiente han elogiado los pasos de las empresas para reducir el impacto climático, también han cuestionado si la compra de compensaciones es suficiente, y dicen que reducir las emisiones es más efectivo. Si la industria de las aerolíneas fuera un país, se ubicaría entre los 10 principales emisores, según la Organización de Aviación Civil Internacional.
JetBlue también comprará combustible para aviones renovable a la finlandesa Neste Oyj, y mezclará entre 25% y 40% de la alternativa con combustible convencional para los 17 vuelos diarios de la aerolínea desde San Francisco a mediados de año.
La aerolínea ha invertido en proyectos de mitigación de emisiones desde 2008, compensando 2.600 millones de libras de emisiones de CO2. También ha cambiado los tractores de equipaje y las cintas de equipaje en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy de Nueva York a energía eléctrica, un cambio que planea ampliar al 40% de su flota para 2025.
Fuente: Bloomberg.