En su declaración en el Tribunal Supremo del estado australiano de Nueva Gales del Sur, el abogado de la familia, Anthony Bartley, afirmó que el rollito de pollo fue comprado en el restaurante KFC de Villawood, en el este de Sydney. Estos hechos ocurrieron en 2005, cuando la joven, Monika Samaan, tenía siete años de edad, sin saber que sucedería despues.
La gigante de la comida rápida Kentucky Fried Chicken (KFC) ha sido demandada por una familia en Sydney, Australia, por los daños físicos y mentales que le provocó una intoxicación por salmonela después de haber consumido un rollito de pollo en un restaurante KFC.
El abogado dijo al juez Stepehn Rothman que oiría pruebas «inquietantes y bastante perturbadoras» sobre las prácticas realizadas en las cocinas de los KFC, incluido el de Villawood.
Monika, que tiene actualmente 11 años y estaba presente en la sala en una silla de ruedas, está interponiendo la demanda a través de su padre. Bartley afirmó que no hay duda de que Monika desarrolló una intoxicación por salmonela.
«Y hay poca o ninguna duda de que el pollo, en el momento en el que ocurrieron estos desgraciados acontecimientos, era la fuente de esa salmonela, según han demostrado todos los científicos», declaró
