(Aeronoticias).- La aerolínea portuguesa TAP registró unas pérdidas de 111 millones de euros en los primeros nueve meses del año por “variaciones cambiarias, sin impacto en la tesorería”, y a pesar del aumento de los ingresos.
En un comunicado divulgado hoy, en el que no hace referencia al resultado del período homólogo de 2018, TAP destaca que las pérdidas hasta septiembre suponen una mejora respecto a las cuentas del primer semestre de este año.
“Excluyendo esta variación cambiaria, el beneficio líquido consolidado del grupo TAP, en el tercer trimestre de 2019, fue de 61 millones de euros positivos, lo que compensa en más del 50 % las pérdidas generadas en el primer semestre de 2019”, señala.
En esos seis meses, el grupo había registrado pérdidas cercanas a los 120 millones.
Entre julio y septiembre, los ingresos consolidados del grupo mejoraron un 6,1 % respecto al mismo periodo del año pasado, hasta situarse en 1.052 millones, por el crecimiento del mercado norteamericano y por la recuperación de Brasil.
El número de pasajeros transportados aumentó un 11,1 % en el tercer trimestre y la empresa va a contratar a más de 800 trabajadores el próximo año, de los cuales más de 100 serán pilotos y unos 600 serán auxiliares de vuelo.
Además, la aerolínea anunció este lunes que va a emitir 300 millones de euros en obligaciones a cinco años, en una subasta dirigida sólo a inversores institucionales y con la que pretende refinanciar la deuda existente y alargar el vencimiento medio.
El Estado portugués posee el 50 % del grupo TAP, en tanto que el consorcio Gateway, integrado por el empresario portugués Humberto Pedrosa (una de las mayores fortunas del país) y el brasileño-estadounidense David Neeleman (dueño de la aerolínea Azul), tiene una participación del 45 %.
El 5 % restante está reservado para los trabajadores del grupo.
Fuente: EFE.
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