(Aeronoticias): Florencia Amat / Aviación Digital. – La petrolera española Cepsa y TUI, uno de los grupos turísticos más grandes del mercado, han llegado a un acuerdo de sostenibilidad para impulsar la utilización de un tipo de combustible que reduzca la huella de carbono. El SAF, combustible sostenible para la aviación, será una pieza indispensable en la lucha contra las emisiones aéreas.
Las dos compañías han demostrado su compromiso con el medioambiente con el desarrollo de estos biocombustibles, los cuales se crean a partir de residuos de materias primas circulares que no chocan con la alimentación como aceites de cocina usados o residuos biodegradables. Estos harán que las emisiones de las aeronaves se reduzcan hasta un 80% con respecto a las producidas actualmente con queroseno convencional.
SAF: el combustible sostenible para la aviación
El SAF no se crea a partir del petróleo, sino que puede provenir de diferentes materiales biodegradables o energías renovables. Los combustibles, basados en electricidad, se crean transformando dióxido de carbono y agua. Estos “power-to-liquid” tienen muchas papeletas de entrar para quedarse en el mundo de la aviación.
De momento, el SAF es más caro y existe en menos cantidades que el combustible tradicional. Por ello, TUI impulsará el uso de estos para conseguir aumentar la oferta y por ende unos precios más competitivos.
TUI, una multinacional que busca las cero emisiones netas
El trabajo de TUI con el medioambiente lleva desarrollándose durante años. Su objetivo principal es conseguir operar viajes con cero emisiones netas para 2050 y así reducir su impacto energético. TUI quiere implementar este tipo de biocombustibles en sus aviones comerciales, pero tampoco descarta incluirlos en otro tipo de transportes como los cruceros o los autobuses.
Respecto al acuerdo con Cepsa, Marco Ciomperlik, director aerolíneas del Grupo TUI afirma que “el SAF desempeña un papel crucial a la hora de reducir las emisiones de la aviación y de TUI. Asimismo, estas colaboraciones contribuyen a aumentar la disponibilidad de combustibles sostenibles de aviación de cara al futuro. Al fin y al cabo, además de conseguir aviones más eficientes, el SAF es una importante palanca para conseguir viajes más sostenibles”.
El futuro de las emisiones aéreas
En noviembre, TUI presentará su agenda de sostenibilidad. Esta empresa lleva mucho tiempo siendo de las más eficientes en cuanto a reducción de su huella de carbono, y parece que seguirá por el mismo camino gracias al uso del SAF. Esta agenda deberá ir en concordancia con el paquete de medidas Fit for 55 de la Comisión Europea. La iniciativa legislativa “RefuelEU Aviation” marca el uso de los biocombustibles en un 2% en 2025, un 5% en 2030 y un 63% en 2050.
Por su parte, Cepsa ya presentó su estrategia de transformación a principios de 2022. Los Compromisos Positive Motion buscan descarbonizar los clientes industriales, así como el transporte marítimo y aéreo e incluso el de su propia actividad. Lo conseguirán gracias a la producción de hidrógeno renovable y biocombustibles.
Cepsa prevé ser el productor líder de biocombustibles para 2030, produciendo 2,5 millones de toneladas anuales y centrándose en la sostenibilidad del tráfico aéreo produciendo 800.000 toneladas de SAF al año. También para 2030, Cepsa se ha propuesto reducir sus emisiones de alcance 1 y 2 en un 55% respecto a 2019, y el índice de intensidad de carbono de sus ventas de productos energéticos entre un 15 y 20%.
Fuente: Aviacióndigital.com