(Aeronoticias).- La próstata es una glándula que forma parte del aparato genital masculino. De consistencia dura, está situada encima del perineo, descansa detrás del recto y delante se halla cerca de la parte terminal del pubis. Esta glándula segrega el líquido prostático indispensable para la estimulación de los espermatozoides y para la dilución del líquido testicular. La forman dos lóbulos que crecen hasta aproximadamente los 25 años. A partir de los 45 años la glándula empieza a engrosarse y a partir de los 60 puede doblar o triplicar su tamaño con el riesgo de formar un tercer lóbulo que puede obstruir el cuello de la vejiga. Esta hipertrofia produce los episodios comunes de trastornos urinarios.
En mi experiencia clínica y en las diversas investigaciones el uso del magnesio en el tratamiento de la prostatitis ha demostrado un alto grado de efectividad incluso en la prevención del adenoma prostático.
El uso regular de suplementos de magnesio en la forma de cloruro de magnesio impide el desarrollo exagerado de la próstata.
El Doctor Pierre Delbet, en sus investigaciones sostiene por ejemplo que un aumento en la ingesta de magnesio detiene la hipertrofia prostática. Según afirma en su experiencia clínica que los hombres que toman suplementos de magnesio por años ninguno ha tenido, según sus investigaciones, trastornos prostáticos.
Particularmente, estoy de acuerdo con el Dr. Dlebet y firmemente convencido de que el cloruro de magnesio juega un rol preventivo importante. Recordemos que el magnesio es un medio para prolongar la juventud de los tejidos y su elasticidad.
Hoy en día existe un desequilibrio muy grande de la relación calcio-magnesio, cuando el calcio rompe el equilibrio los tejidos se esclerosan. Es entonces el magnesio, a través de una buena suplementación, quien ordena la relación y dispone una distribución correcta del calcio.
DIETA VEGETARIANA PUEDE REDUCIR TUMORES DE PRÓSTATA
Los hombres que siguen una dieta vegetariana tienen menores niveles de una proteína asociada al cáncer de próstata, según concluye un trabajo llevado a cabo por un equipo de investigadores del Imperial Cancer Research, en Reino Unido. Los investigadores señalan que este hallazgo sugiere que una dieta exenta de carne podría reducir el riesgo de contraer esta enfermedad neoplásica, a pesar de que es necesario realizar nuevos estudios para poder confirmar tales resultados. De esta forma, se podría recomendar que los sujetos en grupo de riesgo de desarrollar cáncer de próstata eviten tomar excesivas cantidades de carne en sus dietas.
Varios trabajos previos señalan que un nivel elevado de IGF-I -un factor de crecimiento similar a la insulina- podría desempeñar un papel clave en el cáncer de próstata. El estudio, basado en una población de 696 hombres, revela que los niveles de IGF-I eran un 90 por ciento inferiores entre los vegetarianos. Las personas que ingieren carnes fueron definidas como las que comían carne la mayoría de los días de la semana. El estudio, publicado en el British Journal of Cancer, también señala que las investigaciones existentes sobre este tema revelan que las tasas de incidencia del cáncer de próstata son normalmente menores en los países que tienen un bajo consumo de productos cárnicos.
El cáncer de próstata, el segundo más común entre los hombres británicos, acaba cada año con la vida de 9.500 hombres, al mismo tiempo que 21.000 personas contraen la enfermedad de forma anual en dicho país.
