(Aeronoticias).- Corriere della Sera, de Milán: “En su discurso al mundo árabe, Obama no se atrevió a superar todos los obstáculos para insuflarle nueva vida al viejo lema “hope and change” (esperanza y cambio). Ya no le resulta posible defender el status quo sólo por miedo a la inestabilidad que podría ocasionar un cambio en los países afectados. Eso vale tanto para las regiones convulsionadas por la ‘primavera árabe’ como para las sufridas fronteras entre Israel y los territorios ocupados. Obama es muy conciente de los riesgos a los que se expone. En sus planes a futuro no hay ni un puerto seguro ni un verdadero plan para alcanzarlo.”
“Obama no logró el doloroso equilibrio”
Neue Zürcher Zeitung, de Zúrich: “La reciente renuncia del enviado estadounidense al Cercano Oriente, George Mitchell, fue una señal de que EE. UU. no llegará muy lejos en el conflicto entre israelíes y palestinos aplicando solamente el pragmatismo. En la disputa por la ‘Tierra Santa’ no hay un ‘dar y recibir’. El hecho de que Israel siga construyendo asentamientos reduce cada vez más las perspectivas de viabilidad de un Estado palestino. Bajo esas condiciones, para poner fin al actual estancamiento de las negociaciones hace falta algo más que conjuros retóricos. El impulso de la revolución árabe no es suficiente como para hallar una solución válida al conflicto palestino-israelí. El discurso de Obama hubiese sido la ocasión adecuada para presentar nuevamente – y con pautas más claras- el rol de EE. UU. como mediador honesto. Pero perdió la oportunidad por no lograr el doloroso pero necesario equilibrio.”
Estado palestino: condición para la paz duradera
Der Kurier, de Viena: “Obama tiene ahora la oportunidad única de impulsar un nuevo comienzo gracias a la revolución en los países árabes. Pero para poner el marcha el proceso se debe contar con algo imprescindible: una solución al conflicto palestino-israelí, que se debería haber hallado hace mucho tiempo. A pesar de su creciente aislamiento, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aún cree poder dictar las condiciones. Y Obama debería dejar en claro que esos tiempos han llegado a su fin. También para los EE. UU. hay muchas cosas en juego, dado que el camino hacia una paz duradera con el mundo musulmán pasa por la viabilidad de un Estado palestino.”
“Pragmatismo político contradictorio”
Rheinische Post, de Düsseldorf: “El nuevo discurso de Obama al mundo musulmán representa el intento de acompañar los sueños democráticos de la primavera árabe con algo parecido a una estrategia. El cambio trae oportunidades y esperanza, dice Obama a los escépticos, tanto a la casa real de Arabia Saudí como al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. Con esas palabras, Obama coloca a EE. UU. en el lugar que le pertenece por su pasado histórico, del lado de la gente que arriesga todo por defender sus derechos. Sin embargo, concebir un plan visionario, algo así como el ‘Marshall Plan’, sería una especie de ‘misión imposible’. EE. UU. , con su pragmatismo político, pone el acento en otros temas y decide según el caso, en forma práctica y a veces contradictoria.” Fuente: DPA