El conductor del Partido Nacionalista Peruano (PNP), Ollanta Humala, dijo que su grupo político consideraba que frente al grave caso de espionaje cometido por Chile al interior de la fuerza aérea peruana, la reacción del Ejecutivo fue “tibia” en vez de haber sido enérgica, tal como lo ha reclamado el Congreso Nacional donde los representantes de todas las facciones coincidieron en esta posición.
Fue anoche, en el programa “Prensa Libre, que conduce Rosa María Palacios por el canal 4, poco después de haberse reunido en Palacio de Gobierno con el Jefe de Estado, Alan García, junto con otros líderes de la oposición. En dicho programa Ollanta insistió en que Chile no ha cambiado ni cambiará nunca en sus relaciones con el Perú porque mantiene una política de Estado que considera al Perú como un enemigo potencial, herido por la pérdidas de sus territorios en Tarapacá y Arica y porque ansía ser el único país hegemónico del Pacífico Sur, tal como lo planeó su ideólogo Diego Portales hace más de un siglo.
Dijo también que ya era tiempo de replantear las relaciones con dicho país que ha dado seguidas muestras de hostilidad contra el Perú a través de la historia, recordando los casos de un anterior espionaje en 1978 que determinó la expulsión de su embajador y el fusilamiento de un suboficial de la fuerza aérea peruana, así como la venta de armas al Ecuador durante el conflicto del Cenepa, a pesar de su condición de garante que transgredió impunemente
Sobre la operatividad de los servicios de inteligencia peruanos y particularmente de la FAP manifestó que deben ser reorganizadas, mostrando su extrañeza por lo ocurrido dos veces en dicha rama de las fuerzas armadas peruanas que deben ser objeto de una seria investigación porque allí algo anda muy mal.
