La industria del transporte aéreo descansa sustancialmente sobre los factores económicos, como los costos de los leasing de las aeronaves, y su mantenimiento, los combustibles y lubricantes de aviación, los sueldos de pilotos, auxiliares a bordo, mecánicos y personal administrativo, los servicios de atención en tierra, aeronaves, pasajeros, equipajes y mercancías, los costos de las agencias de representación y ventas, el pago de tasas aeroportuarias, etc., expresó el doctor Julian Palacín, Presidente del Instituto Peruano de Derecho Aéreo.
En líneas generales, por cada dólar hoy con el aumento de la gasolina de aviación el 45% se lo lleva el combustible, el 30% los gastos financieros y queda escasísimo margen para los demás costos, los que nos lleva a afirmar que la industria aérea es el sector menos rentable de la economía, e inclusive dijo, en el 2008, las líneas aéreas IATA y las no IATA podrían tener en un gran porcentaje sus líneas en rojo.
Esta realidad sumada a la crisis económica internacional, nos debe llevar a recomendar a los Estados que promuevan las fórmulas de cooperación interempresaria en el transporte aéreo con una política de supervivencia para ahorrar costos dentro de un mercado de transporte aéreo internacional en donde los impuestos, las tasas aeroportuarias y los costos de servicios de navegación aérea han ido en aumento.
Además dijo el doctor Palacín que los países latinoamericanos que poco o nada de liderazgo han tenido a través de la Comisión Latinoamericana de Aviación Civil CLAC, deberían con generosidad poner en agenda notas de estudio que permitan recomendaciones que conviertan a nuestras autoridades de aeronáutica civil en promotoras de formulas de cooperación que podrían plasmar las empresas de aviación, inclusive basadas en los Artículos 77, 78 y 79 del Convenio sobre Aviación Civil Internacional sobre organizaciones de explotación conjunta como una respuesta a la crisis económica internacional que recién este comenzando.
La colaboración, dijo el jurista se concreta en negocios muy variados que puedan ir desde el plano técnico hasta la constitución de sociedades comerciales internacionales.
Por último, expresó que la globalización de la economía internacional y los tratados de libre comercio, dentro de una realidad de América Latina en donde no se siente el liderazgo aerocomercial, nos debe llevar a pensar que son nuestras autoridades de aeronáutica civil, quienes con ingenio aeropolítico deben llevar al seno de la CLAC y de la OACI propuestas y recomendaciones que nos permitan, enfrentar la crisis, apoyar el incipiente desarrollo de nuestras industrias aéreas nacionales y alcanzar objetivos en materia de cooperación interempresaria en aviación comercial a corto, mediano y largo plazo.
