(Aeronoticias): El Abogado Jorge Bustamante Yactayo, especialista en Derecho Aeronáutico y ex miembro de la Comisión de Derecho Aéreo y del Espacio del Colegio de Abogados de Lima, quien expresó su preocupación por el lamentable accidente del vuelo LA2213 que cubría la ruta Lima-Juliaca con un trayecto de más de 1.280 kilómetros, del 18 de Noviembre del 2022 a horas 3:11 PM.
El mencionado Jurista, señalo que el fatal accidente aéreo que cobro lamentablemente la vida de dos bomberos aeronáuticos Ángel Torres Garcia (+44), Nicolás Santa Gadea Morales (+23) y el Manuel Villanueva Alarcón, quien se encuentra en estado de gravedad con traumatismo encéfalo craneano en un hospital de Lima, pudo ser evitado de haberse realizado de manera prudente las coordinaciones pertinentes para que el camión de los bomberos aeronáuticos ingrese a la pista principal del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
Esta descoordinación ha originado graves daños humanos en diversas personas que han sido víctimas de este lamentable accidente aéreo, ya que muchos han sido afectos en su salud física y emocional, los cuales deberán ser indemnizados de manera económica, de acuerdo a la Normatividad Civil Peruana y a la Ley de Aeronáutica Civil del Perú (Ley 27261), que ampara a los pasajeros y tripulantes ante cualquier accidente aéreo o incidente.
Asimismo, el abogado Bustamante, refirió que este accidente ha causado graves daños económicos al Estado Peruano, así como a empresas particulares, personas naturales que debido al cierre de sus operaciones aéreas en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, se han visto imposibilitados de poder realizar sus vuelos aéreos, consecuentemente sus labores, obligaciones y gestiones particulares de manera normal, ocasionándoles un tremendo perjuicio económico y en muchos casos un tremendo daño moral, situación que pudo ser evitada si Lima Airport Partners (LAP) hubiera cumplido con la construcción de la 2da Pista del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, de acuerdo al Contrato de Concesión que le otorgó el Estado, primigeniamente en el año 2001.
Al respecto, las empresas aéreas deben cumplir con reprogramar de manera rápida y eficaz los vuelos que han sido cancelados por este accidente aéreo, en razón que muchos pasajeros se han visto perjudicados al no poder cumplir con sus itinerarios de vuelos e incluso, no solo han perdido sus vuelos nacionales, sino se han visto perjudicados adicionalmente porque han perdidos sus vuelos de conexiones internacionales a otros países en el extranjero, perdiendo además sus tours, sus reservas en hoteles, y sus propias actividades económicas que en su oportunidad no pudieron realizar, debido al cierre intempestivo del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
Por: Jorge Bustamante Yactayo
Actualmente, miembro de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción del Colegio de Abogados de Lima (CAL)
