Senadores estadounidenses defendieron el viernes los ataques de aviones no tripulados sobre Pakistán, un tema que probablemente se volverá más imprevisible si Washington intensifica los esfuerzos por derribar a sus enemigos tras el atentado contra agentes de la CIA en Afganistán.
Pakistán se opone oficialmente a los ataques de aviones no tripulados y argumenta que estos violan su soberanía. Además ha insistido a Washington que le entregue aviones de ese tipo para realizar sus propios ataques.
«No estamos de acuerdo en cada tema. Creemos que, como he planteado y como nuestro Gobierno ha planteado, es una de las muchas herramientas que debemos utilizar para derrotar a un enemigo muy decidido y terrible», expresó el senador estadounidense John McCain.
Desde que el 30 de diciembre un doble agente se inmoló en una base estadounidense emplazada en Afganistán, causando la muerte de siete agentes de la CIA, se ha registrado un alto número de ataques con aviones no tripulados sobre Pakistán.
El ataque, que evidenció una gran falla de la CIA, sumará presión sobre el Ejército estadounidense para encontrar y mermar a milicianos de alto perfil que tienen su base en la frontera entre Pakistán y Afganistán.
Los ataques con aviones no tripulados son vistos por Estados Unidos como una de las armas más efectivas para alcanzar esa meta en un bastión mundial para militantes, que incluyen a altas figuras de Al Qaeda.
Los esfuerzos estadounidenses han causado la muerte de algunas figuras destacadas de Al Qaeda, pero también causan víctimas civiles.
RECURSOS VALIOSOS
Pakistán no se ha opuesto a los ataques que han logrado la muerte de milicianos que luchan contra el Estado pakistaní, como ocurrió en el caso del jefe talibán Baitullah Mehsud.
Sin embargo se opone a ataques sobre lo que ve como activos estratégicos en la región.
Se cree que el grupo militante afgano Haqqani, vinculado a Al Qaeda y que se encuentra entre los más buscados por Estados Unidos, podría estar relacionado con el ataque con bomba a la CIA.
El tema de los ataques con aviones no tripulados fue discutido cuando una delegación de senadores estadounidenses liderada por McCain se reunió el jueves con el presidente pakistaní, Asif Ali Zardari.
Este tipo de ataques constituyen un tema políticamente cargado entre Estados Unidos y su aliado en la región, al que el país norteamericano considera como primordial en su lucha contra los talibanes en Afganistán.
McCain sugirió que no están considerando otras opciones en caso de que los ataques con aviones no tripulados no logren el resultado esperado.
Pakistán teme que los ataques minen los esfuerzos para lidiar con la militancia debido a que las muertes civiles provocan gran molestia pública y aumentan el apoyo hacia los insurgentes.
