(Aeronoticias).-Por querer lucir más bella en el que iba a ser el día más feliz de su vida, le costó la muerte, a una joven administradora de empresas de 30 años, quien tras someterse a una liposucción de cadera y abdomen falleció víctima de un paro cardíaco respiratorio.
La infortunada mujer identificada como Ingrid Court murió la noche del lunes, cuando le realizaban la mencionada intervención, en la clínica Quintanilla, situada en la Avenida Las Artes Sur N° 193, en San Borja.
Los familiares de la joven profesional declararon a la prensa, que se trata de un caso de negligencia médica, puesto que afirmaron que la referida clínica no cuenta con ambulancias propias para trasladar a sus pacientes en casos de emergencia, como lo sucedido con Ingrid.
Ingrid Court estaba próxima a casarse, ello hizo que tomará la fatal decisión de someterse a intervenciones quirúrgicas para mejorar su aspecto, hace dos semanas se hizo una rinoplastía, días después una mamoplastía. Como en ambos casos no se presentó ningún tipo de complicaciones, la administradora se animó a hacerse la liposucción.
La hermana de Ingrid, muy consternada con la repentina muerte de su familiar contó: «El doctor Edmundo Quintanilla Sentenario le recomendó realizarse la liposucción, a pesar de que nosotros le dijimos que no era necesario, lo hizo por vanidad».
La desconsolada madre de la joven explicó que su hija ingresó a la sala de operaciones a la 1:30 p.m del lunes, los médicos le dijeron que la mencionada intervención duraría unas cuatro horas, sin embargo a las 7:00 le informan sobre el delicado estado de su hija.
«El doctor Quintanilla me avisó que Ingrid había sufrido una descompensación y que ellos no contaban con ambulancia para trasladarla a otra clínica». Los bomberos ayudaron a trasladarla a la clínica Ricardo Palma, pero lamentablemente llegó cadáver.
