(Aeronoticias) La Unión Europea (UE) cumple un aniversario más de su fundación y en el mundo se celebra el fin de la Segunda Guerra Mundial. Argelia conmemora la matanza de Setif, en donde murieron 45 mil argelinos –a manos de las fuerzas colonialistas francesas- que marchaban pacíficamente pidiendo la independencia.
Tantos combates en Europa durante toda su historia: peleas tribales, choques por títulos nobiliarios, expansión de reinos, luchas religiosas, disputas fronterizas, anexión de naciones, abolición de países, reparticiones monárquicas, división por bloques ideológicos, Guerra de los 100 años, Primera Guerra Mundial, Segunda Guerra Mundial y demás eventos. 28 países unificados con más de 200 lenguas y cientos de etnias, 503 millones de habitantes, la UE es el mejor ejemplo de cooperación y progreso, a tal punto que en el año 2012 ganó el Premio Nobel de la Paz «por su contribución durante seis décadas al avance de la paz y la reconciliación, la democracia, y los derechos humanos en Europa». La UE es un ejemplo para todas las organizaciones regionales en el mundo.
Problemas hay, las rencillas históricas no se han olvidado, pero las han dejado de lado para lograr la prosperidad. No se les puede pedir, por ejemplo, a los ingleses, franceses y españoles borrar de la memoria sus diferencias o que los polacos den vuelta a la página con los rusos y alemanes tomando en cuenta que a su país se lo repartieron tres veces.
Pero Europa celebra hoy la paz y era una necesidad, después que en la última guerra mundial murieron unas 70 millones de personas. Hay ceremonias en varias partes del mundo. Los rusos siguen enterrando a sus muertos, 27 millones murieron en esa guerra. Alemania celebra su liberación de los nazis y pide perdón. Lástima que las celebraciones de los aliados fueron por separado, debido a la protesta contra Rusia por haberse anexado Crimea y desestabilizar a Ucrania. Pero el homenaje al soldado soviético desconocido se dio en todo el mundo. Israel recordó, por su parte, a las víctimas del Holocausto, seis millones de judíos muertos a manos de los nazis.
De otro lado, Argelia evoca un hecho doloroso en su historia por el asesinato de miles de argelinos a manos de las tropas colonialistas francesas, hecho que para muchos fue el inicio de la guerra de independencia. Francia aún no muestra arrepentimiento ante la masacre, como lo hace cualquier nación civilizada como Italia que pidió perdón a Libia por la colonización y se comprometió a invertir US$ 200 millones anuales durante 25 años o Japón que pidió perdón a Corea del Sur por el sufrimiento causado durante la ocupación nipona.