(Aeronoticias).- El piloto Francisco Curto Villacorta y Jorge Ríos de la línea aérea turística Aerodiana fueron liberados por sus captores presuntos narcotraficante en medio de la selva peruana., caminaron durante 10 días en llegar a Puerto Maldonado y bajaron 15 kilos, presentando un cuadro de deterioro psiquico – físico por el maltrato psicológico a que fueron sometidos por estos aerodelincuentes.
A las 5 p.m. del día de ayer cuando el celular de Verónica –esposa de Francisco Curto – sonó insistentemente, era un presagio de un milagro de vida, Al contestar, la voz de su esposo, Francisco Curto Villacorta, le devolvió la alegría de vivir. Veinte días habían pasado ya desde que él y su compañero de vuelo, Jorge Ríos, desaparecieron en un misterioso secuestro aéreo, que tuvo conmocionado al país.
Aeronoticias a las 6.15 pm. dio la primicia a nivel mundial informando que aparecieron con vida piloto y copiloto de Aerodiana secuestrados en noticia que fue tomadas inmediatamente por el buscador mundial Google noticias, en donde afirmamos que se hizo el milagro. Al haber aparecido con vida el Cmdte. Francisco Curto y el copiloto Jorge Rios en Iñapari: http://www.aeronoticias.com.pe/noticiero/index.php?option=com_content&view=article&id=12161;aparecieron-con-vida-piloto-y-copiloto-de-aerodiana-secuestrados&catid=1&Itemid=47
Este acto de terrorismo aéreo, fue el más sonado de los últimos años en el Perú comenzó a las 7:15 a.m., del pasado 10 de junio, cuando un grupo de falsos pasajeros turistas que clonaron identidad ajena abordaron la aeronave Cessna Caravan de matrícula OB-1922P, en el aeródromo María Reiche de Nasca, la aeronave de la empresa Aerodiana debía volar durante 60 minutos sobre las enigmáticas figuras de Nasca y Palpa para luego regresar al terminal aéreo. Sin embargo, la última comunicación con la torre de control de Nasca ocurrió a las 7:47 a.m. Luego, todo fue silencio hasta ayer a las 4:20 p.m.
Un primer análisis habría determinado graves fallas en la seguridad aeroportuaria que estaba a cargo de la Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Comercial CORPAC y la Municipalidad Distrital de Vista Alegre, por su parte el Ministerio de Transportes, unos días antes le habría dado la responsabilidad de este aeródromo a Corpac.
Según fuentes consultadas los mismos pilotos habrían comentado a su colega Juan Carlos Ruiz, que estuvo en la torre de control el día que desapareció la aeronave, y a quien llamaron ayer, los falsos turistas los insultaron y golpearon. Luego los obligaron a apagar la radio de la aeronave y de inmediato les señalaron un nuevo rumbo y la altura de vuelo que debían mantener para evitar ser detectados por los radares, lo que prueba que los aeronarcotraficantes tenían conocimiento de navegación aérea. Si bien estos delincuentes del aire no habrían estado armados, la superioridad numérica y la amenaza de muerte que pesaba sobre el piloto y copiloto habrían impedido que ellos continuen al mando de la aeronave presentándose un típico caso de desapoderamiento ilícito, delito previsto en el convenio de la Haya de 1970 sobre apoderamiento ilícito de la aeronaves suscrito y ratificado por el Perú.
Se presume que esta acción coercitiva habría impedido que la tripulación intente cualquier contacto con la Torre de Control y que la fuerza física superior de los delincuentes por su superioridad, habrían impedido cualquier defensa por parte de los pilotos.
Según el diario El Comercio.com.pe “Los tripulantes también contaron a Ruiz que aterrizaron en un lugar desconocido de la selva, pero que durante diez días los obligaron a realizar vuelos a baja altura a diversas partes de la selva. No se conoce hasta el momento hacia adónde volaban, cómo se abastecían de combustible ni qué cargas trasladaron. Solo contaron a su amigo que no fueron maltratados, pero que siempre estuvieron bien vigilados por sus secuestradores.
Luego de permanecer diez días secuestrados, y dos días después de que Verónica Cachique, esposa de Francisco Curto, suplicara a los secuestradores que dieran libertad a los cautivos “sanos y salvos” antes del Día del Padre, los pilotos de Aerodiana fueron abandonados en plena selva de Madre de Dios el 20 de junio, hasta ayer que lograron llegar a la ciudad de Puerto Maldonado.
Lo último que pudieron contar los pilotos a Juan Carlos Ruiz fue que habían perdido por lo menos 15 kilos de peso cada uno, que tenían la barba crecida, pero que se encontraban bien de salud, aunque sin dinero. Solo tenían en sus bolsillos las monedas que utilizaron para llamar a sus familias y amigos más cercanos.
De inmediato los funcionarios de la empresa aérea se comunicaron con el hotel Cabaña Quinta donde Francisco Curto y Jorge Ríos por fin pudieron descansar. Conocidos los hechos, una gran cantidad de periodistas se acercaron al hospedaje para indagar por ellos, pero la policía había llegado antes para interrogarlos.
En Lima, se conoció que los pilotos habrían sido amenazados por sus secuestradores para que evitaran dar cualquier información sobre el rapto. El paradero de la avioneta Cessna aún es un misterio”.
Aeronoticias considera que es un milagro que el piloto y copiloto hayan aparecido con vida, ahora se tienen que profundizar las investigaciones para encontrar las omisiones en la seguridad del aeropuerto Maria Reiche de Nasca a fin de que a futuro, no se puedan repetir en este u otro aeropuerto del país, actos de piratería alguna.