(Aeronoticias).- La compañía aérea Philippine Airlines (PAL) se encuentra actualmente en crisis originada por una renuncia masiva de pilotos, la cual obligó a suspender varios vuelos. Este problema incluso está generando inquietud en el Gobierno filipino. Los representantes de la aerolínea intentan recuperar a los 25 capitanes que se marcharon en masa a compañías extranjeras en busca de mejores sueldos, pero siguen sin convencerlos de regresar.
Los Miembros del gabinete de gubernamental se involucraron en las conversaciones para solucionar la crisis que afecta a los vuelos domésticos y amenaza con extender su impacto a las rutas internacionales. El presidente de PAL, Jaime Bautista, admitió que de entrada se esfumaron los planes de incrementar los vuelos hacia la costa oeste estadounidense, una ruta extremadamente rentable y demandada.
Bautista agregó que para Philippine Airlines resulta difícil competir en salarios con aerolíneas del Medio Oriente y otras asiáticas, que pagan el doble a sus pilotos. «Esperamos encontrar una solución que no afecte a los pasajeros y que la economía no sufra por una disputa interna», declaró el presidente de Filipina tras asignarle el caso a cuatro de sus ministros.
