(Aeronoticias) El día de hoy un ex agente de la policía filipina, identificado como Rolando Mendoza, secuestró un autobús en Manila, el cual transportaba a 25 turistas, la mayoría de Hong Kong y durante 13 horas amenazó con asesinarlos si es que no le reponían su cargo.
Sin embargo, durante las primeras horas del plagio el portavoz de la Policía Nacional, Agrimero Cruz, indicó que tres mujeres y tres niños fueron liberados por Mendoza y trasladados luego a las dependencias policiales para que aportasen información.
Una de las liberadas fue una madre que salió del vehículo llevando de la mano a sus tres hijos pequeños y a quienes cerca de la puerta del vehículo aguardaban dos negociadores de la Policía.
Luego, el secuestrador liberó a otro rehén, un hombre de mediana edad que dijo ser diabético, y al que dejó ir a cambio de que las autoridades suministrasen agua y alimentos.
Después fueron puestos en libertad otros dos rehenes filipinos, el guía-intérprete y un fotógrafo, Danilo Negrín, de 64 años, de modo que eran 16 las personas seguíancautivas en la recta final del secuestro.
Según informó la televisora local, la Policía logró ingresar al vehículo y una agente le dio un disparo en la cabeza al secuestrador. En las imágenes previas al develamiento del secuestro, pudo observarse el sin vida cuerpo del, aparentemente, secuestrador colgado de la puerta principal del bus.