El alquiler de cada avión le costará a la compañía unos 200.000 dólares mensuales y los nuevos aparatos se utilizarán para cubrir rutas domésticas y hacia destinos de Sudamérica.
El gobierno argentino, que lleva adelante un juicio sumario para expropiar la línea aérea y sus subsidiarias a Marsans, mantiene en pie negociaciones con la europea Airbus para absorber un contrato firmado en 2007 por el grupo español para adquirir una treintena de aviones.
Sin embargo, esa conversaciones están trabadas por la falta de financiación para la operación de compra se supo según un informe sobre el estado decadente de la flota de Aerolíneas y su subsidiaria Austral (vuelos domésticos), que tienen aparcados en el aeropuerto de Ezeiza, el principal de Argentina, 25 aviones -entre propios y alquilados- que no pueden volar por su antigüedad o su falta de mantenimiento.
"Los 15 aviones propiedad Aerolíneas-Austral se usan para extraer repuestos. Las otros 10 pertenecen a leasors (empresas que alquilan aeronaves con opción a compra), como Triton y Sky, que alquilan los aviones, y nos cuestan unos 300.000 dólares por mes".