El cuestionado obispo inglés, Richard Williamson, quien puso en duda que 6 millones de judíos hubieran sido eliminados en las cámaras de gas de la Alemania nazi durante la II Guerra Mundial, fue conminado por el Vaticano a retractarse públicamente por las declaraciones que prestó a una radioemisora sueca el pasado mes de enero.
Williamson, desató las iras del pueblo judío en todo el mundo al negarse a admitir que hubo Holocausto y una de las consecuencias de su pronunciamiento fue su expulsión del territorio argentino donde ejercía funciones religiosas, obligándolo a dirigirse a su país de origen, donde se encuentra ahora.
La Santa Sede considera que no ha sido suficiente el comunicado que firmó el obispo pidiendo perdón por el escándalo que produjo y exige que Williamson se retracte de forma pública y rotunda, de tal modo que quede claro el distanciamiento de sus posiciones con relación al Holocausto.
