(Aeronoticias).- Luego de las diversas especulaciones en el que sin conocimiento jurídico se habría difundido el rumor de que con el logo de la desaparecida AEROPERU se podría impulsar a la línea aérea de bandera que se viene trabajando desde el proyecto de ley 3519-19 del Congreso de la República del Perú, el consultor de este proyecto Julián Palacin Fernández autor del libro “La línea aérea de bandera del Perú” informó que sigue adelante este sueño y que ahora estamos en la etapa de definir los socios estratégicos y los capitales extranjeros y peruanos que quieren completar la hoja de ruta que trazó nuestro presidente de la República en su mensaje al congreso el 28 de julio de 2011 cuando dijo que “Tomaremos las medidas necesarias para que el Perú tenga su línea aérea de bandera y que el mercado aerocomercial sea más abierto y de mayor competencia, sobre todo para abaratar y ampliar la comunicación al interior del país”.
Quien desee resucitar Aeroperú dijo una fuente consultada requeriría pagar más de mil millones de dólares de deuda e intereses, lamentablemente el nombre ya está off side, es decir fuera de juego es una empresa que fracasó y nos trae malos recuerdos, es por ello que desde que se presentó el primer proyecto de ley pensamos en una nueva denominación que inicialmente se llamó Aerolíneas del Perú y ahora se llama Aerolíneas Contigo Perú cuyo nombre ha sido inscrito en INDECOPI.
En los próximos días tendremos novedades sobre los avances de la que sería la línea aérea privada que estaría asociada al Estado con un mínimo capital del 3%, es decir el 97% sería privado.
El creador de la línea aérea Aerolíneas Contigo Perú dijo que el modelo de explotación sería low cost cuyo concepto procede de la literatura inglesa y existen tres acepciones que se relacionan en este contexto: el bajo precio o low fare, el bajo costo o low cost y el sin adornos, no frills. Las aerolíneas de este tipo ofrecen vuelos a precios más bajos que las tradicionales. Para esto, ahorran significativamente en sus costos superficiales, eliminando servicios innecesarios sin afectar en nada la calidad y seguridad de las operaciones aéreas.
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