(Aeronoticias).- Las autoridades nigerianas han retirado la licencia de vuelo a la aerolínea Dana Air, después de que uno de sus aviones se estrellase el domingo contra un edificio de Lagos, la capital económica del país, matando a 153 personas. Un portavoz de la Aviación Civil nigeriana ha anunciado la suspensión del permiso.
«Hemos suspendido la licencia de operación tras el choque. Tenemos que investigar el conjunto de su funcionamiento. No volverán a volar antes de recibir de nuevo la autorización», añadió.
Los servicios de emergencias han recuperado hasta el momento 148 cuerpos entre los restos del fuselaje del avión. La aerolínea nigeriana confirmó el lunes que a bordo del aparato viajaban 146 pasajeros y siete miembros de la tripulación. Al menos seis personas que se encontraban en el edificio contra el que impactó el avión también fallecieron a causa del accidente: «Hay seis muertos en el edificio. De esos seis, cuatro eran residentes y dos habían ido a ver un partido de fútbol [en televisión]», indicó otro portavoz.
Muchos de los cuerpos resultan irreconocibles por las profundas quemaduras, por lo que harán falta pruebas de ADN para identificarlos. A la espera del resultado de las investigaciones y de que se encuentre la caja negra, los medios nigerianos informaron, citando a fuentes del sector aeronáutico, de que los motores del avión se incendiaron y fallaron antes del siniestro.
Una fuente de Dana Air cuyo nombre no se ha facilitado explicó a la televisión local Channel TV que la aerolínea mantenía el avión accidentado operativo pese a no estar en buenas condiciones, si bien la compañía ha negado ese extremo.
El accidente, el peor de Nigeria en dos décadas, era el segundo que un aparato de ese país sufría en 24 horas, después de que el sábado un avión de carga se saliera de la pista del aeropuerto de Accra y embistiera a un autobús, causando 10 muertos.
ABC.es
