El sindicato de Trabajadores Automotrices Unidos, que agrupa a la mayoría de los obreros y empleados de este sector en Estados Unidos, ratificó el viernes un paquete de concesiones destinado a reducir los costos de mano de obra de General Motors.
El presidente del UAW (siglas en inglés del gremio), Ron Gettelfinger, dijo en conferencia de prensa el viernes que un 74 por ciento de los 54.000 obreros de la GM en Estados Unidos votaron a favor del acuerdo.
La votación fue divulgada antes de la esperada declaración de bancarrota de la GM, el lunes, bajo la protección gubernamental de la Ley de Quiebras. Expertos en quiebras dijeron que el acuerdo alcanzado por el UAW permitirá hacer avanzar el procedimiento a través del tribunal con más rapidez.
El UAW dijo que los cortes permitirán a GM ahorrar entre 1.200 y 1.300 millones de dólares por año.
Diana Tremblay, vicepresidenta de GM para relaciones laborales, dijo en un comunicado que "apreciamos realmente el respaldo de nuestros empleados y de nuestros jubilados". Tremblay añadió que "los sacrificios compartidos permitirán a GM convertirse en una empresa más vigorosa y viable, que continuará fabricando vehículos y camiones de primera clase".
Los líderes del UAW acordaron la semana pasada aceptar un contrato revisado que congela salarios, pone fin a las bonificaciones, elimina normas de trabajo no competitivas y acaba con la posibilidad de huelgas hasta que expire el próximo contrato, en el 2015.
También ofrece a un fondo de pensiones de salud administrado por el sindicato un 17,5 por ciento de participación en las acciones de GM, tras la protección obtenida por la ley de quiebras y la posibilidad de adquirir otro 2,5 por ciento. Ese paquete será a cambio de parte de los 20.000 millones de dólares de deudas de GM con el fondo.
GM ha recibido 19.400 millones de dólares en préstamos del gobierno, que obtendrá un 72,5 por ciento de propiedad de la nueva compañía, tal vez con participación del gobierno de Canadá. El 10 por ciento restante irá a tenedores de bonos de GM para eliminar 27.000 millones de dólares en deudas no aseguradas.
