(Aeronoticias).-Muchas veces no le damos la importancia debida, sin embargo el Perú pierde anualmente 5,000 millones de dólares gracias a la baja productividad de los trabajadores, afectados terriblemente por problemas neuropsiquiátricos como la depresión, enfermedad de slaud mental que tiene y debe ser tratado por especialistas.
Esta cifra dada corresponde a una revisión del Estudio de Carga de Enfermedad, que ha sido efectuada recientemente por la Unidad de Generación de Vivencias en Salud del Instituto Nacional de Salud, así lo explicó la directora de Salud Mental del Ministerio de Salud, Gloria Cueva.
Afirmó que la depresión es uno de los problemas de salud mental más comunes, y sin embargo es el que se presenta con mayor frecuencia y se caracteriza no sólo por la tristeza que embarga a la persona afectada, sino por el desánimo, por esa pérdida de gusto por la vida.
Todo esto, conlleva a una baja productividad en el trabajo, dado que amanece sumamente cansado y en muchas oportunidades está tan mal que simplemente no puede trabajar porque el cuerpo no le da para más. Se encierra a cavilar en sus preocupaciones, llega tarde al trabajo y tiene problemas o simplemente deja de trabajar.
“Y si va a trabajar lo hace a duras penas, marca su ingreso, hace lo mínimo que puede y marca su salida con el mismo desánimo. Todo eso sumado producirá un efecto económico importante para el desarrollo”, anotó. Si se prolonga por más de dos semanas, hay que buscar ayuda.
Cueva advirtió, que se requiere saber diferenciar lo que es una tristeza pasajera de un estado de ánimo permanente, que no deja que el afectado cumpla sus funciones adecuadamente.
“Si esa sensación de decaimiento y pena se prolonga por más de dos semanas y es un sentimiento que agobia y no lo deja funcionar, lo más adecuado es buscar ayuda psicológica y médica”, aconsejó.
Señaló que los médicos sabrán recetar los fármacos adecuados para restablecer a la persona, mientras que la ayuda psicológica o consejería permitirá que se sienta acompañado en su proceso de recuperación.