(Aeronoticias).-Tras los conflictos laborales de Iberia por su intención de recortar 4.500 empleos y una serie de paros como respuesta de los sindicatos que se anunciará esta misma semana, la ministra de Fomento, Ana Pastor, lanzó un mensaje de «entendimiento y negociación» y ha añadido que «todos tienen que arrimar el hombro» para que la viabilidad de los aeropuertos españoles no se vea seriamente afectada
«España no puede permitirse una huelga de un sector estratégico», ha afirmado la titular de la cartera, tras reconocer las «limitaciones del papel del Gobierno» en las turbulencias que atraviesa el transporte aéreo en el foro organizado en Madrid. Pastor ha recordado que las compañías «tienen que ser viables» y ha destacado la importancia de que sigan siendo españolas.
Cabe precisar que la ministra, que hace dos semanas afirmó que los despidos debían de ser considerados como la «última opción» ante las pérdidas de Iberia, asegura que ha hablado con todas las partes implicadas para «ayudar y hacer posible que los planes de reestructuración sean de presente y de futuro».
Mientras tanto, los sindicatos con representación en Iberia siguen trabajando en el calendario de protestas y barajan convocar seis jornadas de huelga entre el 14 y el 21 de diciembre, según fuentes de UGT. Los únicos que parece que se van a quedar al margen son los pilotos, dado que su sindicato, el Sepla, considera que antes debe solucionarse un conflicto anterior con iberia: la creación en marzo pasado de la low cost Iberia Express, cuya legalidad pone en entredicho el Sepla y está pendiente de un laudo arbitral.
La ministra ha calificado AENA de empresa «muy competitiva» y ha revelado la intención del Ejecutivo de dar entrada al capital privado en el gestor aeroportuario en el primer semestre del próximo año.
El Gobierno, según Pastor, tiene previsto aprobar un plan de racionalización del sector ferroviario antes del 31 de marzo, que incluye la revisión de los proyectos de construcción o reforma de 24 estaciones de tren, en su mayoría destino de líneas de Alta Velocidad (AVE).
Uno de los objetivos de Fomento es ampliar el acceso al AVE («el transporte del siglo XXI», de acuerdo con la ministra) y racionalizar la oferta de servicios, a través de la optimización de la infraestructuras.
El plan, que se elaborará junto con ayuntamientos y comunidades autónomas, se ceñirá a las inversiones consideradas «necesarias», para «no pasar después la verguenza de tener enormes estaciones de tren vacías».
En 2013, el Ejecutivo incrementará los fondos destinados a la compensación de concesionarias de autopistas en riesgo de quiebra, a través de una enmienda a los Presupuestos Generales presentada por el grupo del PP en el Senado. Estas ayudas llegarán hasta el 80% de los ingresos por tráficos que dejen de percibir respecto a los inicialmente estimados, frente al 49% actual.
