(Aeronoticias).-Tras el vano intento de reflotar la empresa cuyo principal accionista es Globalvía pero con participación también de Bankia y FCC, la exconcesionaria del aeropuerto de Castellón, Concesiones Aeroportuarias, ha solicitado declararse en concurso de acreedores.
Según informaron desde el TSJ, la exconcesionaria ingresó en concurso voluntario, por lo que se nombrará a un administrador que será quien tome las decisiones empresariales para saldar las deudas. La declaración llega casi un año después de que la Generalitat rompiera el contrato para gestionar el aeropuerto y dejase a la instalación en una situación de la que aún no ha salido.
La ruptura del contrato llevó a la exconcesionaria a denunciar a la Generalitat en un contencioso que sigue abierto. En la denuncia, la sociedad privada encargada de la construcción y explotación del aeropuerto reclama al Consell 126,4 millones más IVA por las obras y por los daños. De los 120 millones de euros que ha costado la instalación, 80 corresponden al capital privado de Concesiones y 40 millones fueron préstamos concedidos por la Generalitat. En un inicio, desde la sociedad pública Aerocas se intentó llegar a un acuerdo para solucionar el conflicto pero finalmente se ha optado por que sea el juzgado el que dictamine.
Fue en septiembre cuando la exconsejera Lola Johnson avanzó que las negociaciones que arrancaron en enero de este año no avanzaban y que la solución de los tribunales “es la más justa”.
Concesiones presentó en julio el preconcurso para evitar que sus acreedores le reclamasen la deuda. La sociedad no ha podido solucionar el problema. De haber llegado a un acuerdo amistoso podría haber destinado los fondos de una supuesta indemnización del gobierno valenciano a pagar a sus acreedores.
La entrada en concurso y la consiguiente declaración de un administrador puede complicar aún más el futuro del aeropuerto que todavía está esperando los permisos necesarios para comenzar a operar.
