Por ello sobre el sistema universitario actual, Hernán Lanzara, Director Institucional de la CCL señaló que se debe respectar la iniciativa privada. “Como empresarios sabemos que la calidad de nuestros productos y servicios deben satisfacer al 100% las expectativas de nuestros clientes, si eso pasa en todos los mercados ¿Por qué no podemos aspirar lo mismo en la educación, siendo esta la inversión más importante que hagamos en nuestras vidas?”, señaló.
Asi a través de su Comisión de Educación de la CCL agregó que el sistema universitario debe incrementar la competitividad de la enseñanza académica y satisfaciendo las demandas del mercado laboral actual.
Idel Vexler, presidente de la comisión de Educación de la CCL señaló que «se debe asegurar una oferta educativa moderna en función de los requerimientos del mercado laboral, el sostenimiento del crecimiento económico así como el desarrollo sustentable y humano». 
Precisó que si bien el crecimiento de las universidades privadas en la última década ha sido exponencial aún falta mucho por hacer. Comparando este comportamiento con sistemas referentes del primer mundo, como el de Estados Unidos existen 10.42 universidades por cada millón habitantes, en el Perú existen 4.19 universidades por cada millón de habitantes.
Asimismo, el presidente de la Comisión de Educación de la CCL, refirió que existe actualmente en el mercado laboral una demanda insatisfecha por profesionales de determinadas carreras como por ejemplo: Agropecuaria y Agroindustrial, Pesca y Acuicultura, Biocombustibles y Forestal, Minería, Metalurgia y Nanomateriales, Ciencias de la Vida y Biotecnologías, Ciencia y Tecnología de Materiales, TIC y Ciencias Básicas.
Igualmente, puntualizó que es necesario priorizar la calidad como elemento diferenciador, pues la excelencia universitaria debe ser entendida como el posicionamiento profesional de las personas que forman parte de cada universidad. Esto va ligado al tema de la certificación y recertificación profesional que se puede promover con las empresas mediante Convenios institucionales.
“La educación profesional para la competitividad implica el desarrollo altas capacidades, dominio del conocimiento moderno y sobretodo, el desarrollo y la puesta en práctica de valores y actitudes positivas”, agregó el educador.
