Cuba arriba al Día Mundial de Población, el 11 de julio, con una alta expectativa de vida y el 17 por ciento de su población con más de 60 años de edad, esa cifra representa 1.908.532 personas, más de un millón de ellas mujeres, explicó el doctor Moisés Jaime Balí Balí, especialista asesor de la Dirección Nacional del Adulto Mayor (DNAM).
Dijo que la esperanza de vida en la isla antillana es de 77,97 años, y que el cubano que llega a 60 años, tiene la esperanza de alcanzar otros 21, y el que cumple 80, puede aspirar a vivir ocho años más. «Un país que tenga una bajísima mortalidad infantil, como la de Cuba, que es de 4,7 por cada mil nacidos vivos, y una extraordinaria supervivencia de sus adultos mayores, tiene los signos más destacados del desarrollo social», añadió el especialista de Segundo Grado en Admnistración de Salud.
«Nuestro adulto mayor es expresión de los logros de la Revolución, particularmente de un proyecto social que lo favorece, e incluye la creación de diversas instituciones para su atención», dijo. Balí Balí explicó que esta alta expectativa de vida se debe a la disminución de la mortalidad, desaparición de enfermedades infecciosas y parasitarias, mejora de la nutrición general y atención integral a la población por parte del Estado.
Añadió que el envejecimiento en Cuba es también resultado del desarrollo político y socio-económico que ha hecho disminuir la natalidad, ya que muchas mujeres cubanas priorizan estudiar, ser profesionales o dirigentes, y posponen o no asumen la maternidad. «La Organización Mundial de la Salud (OMS) promueve que los ancianos participen en el desarrollo socioeconómico del país, que tengan vivienda, alimentos y seguridad social y estén rodeados de afecto, y en tal sentido trabaja Cuba, con numerosas instituciones creadas por la Revolución con ese propósito», agregó.
El experto explicó que esas instancias dedicadas a atender al adulto mayor cubano laboran concatenadamente, y entre ellas mencionó al Medico y la Enfermera de la Familia, que tienen que atender de forma permanente a los ancianos; y el Equipo Multidisciplinario de Atención Gerontológica (EMAG), presente en cada policlínico. Habló también sobre las 227 Casas del Abuelo, los 35 servicios de geriatría existentes del país, los Centros Comunitarios de Salud Mental y los de Rehabilitación Integral de los policlínicos, los centros secundarios de salud, (hospitales), y los terciarios, (institutos especializados, como el de Gastroenterología, entre otros).
Balí Balí explicó que la Casa del Abuelo es un centro diurno para ancianos que han perdido alguna habilidad y tienen dificultades para el uso de instrumentos, o para hacer cosas sencillas, y que la familia los lleva en la mañana y los recoge por la tarde. Allí socializan, tienen actividades culturales, juegos, entretenimientos y trabajos manuales, y se trata de ayudarlos a recuperar sus habilidades perdidas, y para los que tienen un poco mas de salud, sobre todo mental, funcionan las Casas de Cultura y los Amigos del Libro, donde pueden departir, leer y ampliar conocimientos.
Por su parte, los servicios de geriatría, mediante ingreso temporal, les brindan asistencia multidiscipinaria de fisiatras, psicólogos, oftalmólogos, podólogos y otros especialistas, mientras el Hospital de Día Geriátrico (existen una docena en Cuba) completa el trabajo hospitalario, sin que el paciente esté en cama. Los cubanos cuentan además con 15,047 Círculos del Abuelo, una entidad asociativa independiente, donde más de 830,000 personas de la tercera edad socializan y realizan actividades culturales, recreativas, juegos de mesa y excursiones, así como ejercicios físicos, explicó el doctor Balí Balí.
La atención en Cuba al sector de más edad incluye el Hogar de Ancianos, para aquellos que ya NO son capaces de atenderse a sí mismos, carecen de familia o ésta NO puede cuidarlos, los cuales representan el 0,5 por ciento de los adultos mayores de la isla, dijo el experto de la DNAM. El Ministerio del Trabajo y Seguridad Social tiene un programa conjunto con Salud Pública para brindar ayuda económica y otros servicios a los ancianos, que también cuentan con el apoyo de los trabajadores sociales como promotores de salud, añadió.
El especialista cubano precisó que más del 10 por ciento de los ancianos del país caribeño viven solos o con otra persona de edad similar, por lo cual el Estado prioriza su atención.