(Aeronoticias).- El 40% de ciudadanos británicos asociados a programas de vuelo nunca han canjeado sus millas gratuitas. Los programas de fidelidad de las aerolíneas, diseñadas para captar a una clientela ávida de usuarios con la promesa de volar gratis, son los responsables de que esto suceda.
¿Motivos? Limitaciones que restringen un pleno uso en estos servicios. Como un producto a punto de perecer: la fecha de caducidad, además de exigir un consumo mínimo en el servicio y las restricciones en las fechas.
Para James Berry, director de producto de una firma especializada en programas de recompensas -como las de fidelidad-, el deseo por adquirir la recompensa termina volviéndose, luego de conocer los tejemanejes de las aerolíneas, en una frustración. Desde el bando opositor, el presidente de IdeaWorksCompany (dedicada a maquinar programas de lealtad de las aerolíneas), Jay Scrensen, los resultados del estudio no parecen impactarle.
Y es que ni EasyJet, ni Ryanair, las principales aerolíneas del mercado inglés, han planificado un programa de fidelidad de pasajeros. El caso de British Airways es una «ida de la olla»: Sólo se puede ser miembro del Executive Club siendo virtualmente un viajero «business».
Pero no todo está perdido. Recompensar a las aerolíneas que cumplen los mejores programas de lealtad es el trabajo de Gary Left, cofundador de milepoint.com, comunidad de viajeros frecuentes. Y en el caso de ser esquiva una empresa para reconocer a su cliente, uno puede terminar «obligándole» por otras vías. Es el caso de Delta, cuyas solicitudes para viajes gratuitos llegaban al 36,5% de éxito. Los programas de vuelo de Air France-KLM, en oposición, son buenos. Y la relación entre ambas es que son socios, de tal manera que siendo miembro del programa SkyMiles de Delta puede uno reservar millas con Air France.
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