(Aeronoticias).- Bajo una capa de 33 toneladas de ripio permaneció intacta durante 1’200 años el gran “tesoro Wari”, el mismo que saqueadores de tumbas no pudieron profanar. Los arqueólogos Milosz Giersz, director del proyecto arqueológico, y su esposa Patrycja Przadka-Giersz de la Universidad de Varsovia, así como sus colegas peruanos, Krzysztof Makowski y Roberto Pimentel de la Pontificia Universidad Católica del Perú, fueron los descubridores.
Sus diez años de experiencia en la zona les incentivó a continuar desvelando los más preciados secretos de los Wari, en una competencia de carrera con los huaqueros que irrumpen con las investigaciones al destruir sitios arqueológicos de estudio.
Finalmente se registraron aproximadamente unos 1200 objetos de trascendente valor cultural. Ahora, todos estos ajuares culturales serán puestos bajo custodia por especialistas y luego expuestos para el conocimiento del público amplio con el auspicio de una compañía minera, la colaboración del Museo de Arte de Lima y el apoyo del Ministerio de Cultura.
