El aumento en el tipo de cambio ha impactado en los precios de diversos productos que a final de cuentas reducen el poder de compra de los consumidores finales. De hecho, el 28% de las empresas indicó que la depreciación de la moneda frente al dólar se tradujo en un aumento de los precios de sus productos y servicios.
El periodo de mayor volatilidad sobre el peso inició en octubre del año pasado, cuando el tipo de cambio aumentó hasta 40%, mientras que la inflación alcanzó un máximo de 6.5% en enero pasado. Los mayores costos se debieron a que alrededor del 39% de los insumos que utilizan las 455 empresas encuestadas son importados, lo que impactó más a las empresas industriales.
Para enfrentar estos mayores costos, un 31% de las firmas dijo que disminuirá su margen de ganancias, 19% reducirá su planta laboral, 15% realizará aumentos salariales menores y/o reducirá prestaciones y 7% disminuirá la jornada laboral. La cotización de la moneda mexicana ha reducido su volatilidad en los últimos meses, por lo que el 50% de las compañías realizó los aumentos de precios por la depreciación cambiaria en el primer semestre del año, 13% dijo que lo hará en el segundo semestre y el 37% a lo largo del año.
Estos datos sugieren que «la mayor parte del incremento en costos, que sería trasladado a los precios ya ha ocurrido», dijo el Banco de México en el reporte de inflación del segundo trimestre del año.
A mayo pasado a junio pasado la inflación anual fue de 5.74%, continuando con la tendencia descendente iniciada en mayo. «La inflación la subyacente desciende y el ancla impuesta a los precios de la gasolina y el gas doméstico son un pilar importante del actual descenso inflacionario», dijo Banamex Accival. Además se sostuvo, se espera que al cierre del año la inflación no supere el 4.5%.
