En cambio, en Lima Metropolitana se registra un predominio en la afiliación a ESSALUD, reflejado en una mayor cobertura en hombres (26,7%), que en mujeres (25,6%); mientras que el SIS registra una afiliación mucho menor, en donde se observa mayor acceso de las mujeres (9,4%), frente al de los hombres que alcanzan el 7,6%.
Cabe destacar que el Seguro Integral de Salud, cumple un importante rol de protección a la población de menores recursos, especialmente en las zonas de mayor pobreza y en especial en las áreas rurales.
Por grupo de edad de la población beneficiaria de algún programa alimentario, se observa que en el grupo de 0 a 17 años de edad se registra un mayor acceso de beneficiarios (31,1%), que beneficiarias (29,6%), lo que representa una diferencia de 1,5 puntos porcentuales a favor de los varones.
Por otra parte, en el acceso a algún programa alimentario de la población de 60 y más años de edad, se registra mayor proporción de beneficiarios en la población femenina (10,5%), respecto a la población masculina (7,1%) de este grupo de edad.
Similar comportamiento se registró en Lima Metropolitana en donde las mujeres presentan una tasa de asistencia a educación secundaria de 86,9%, que representa una ventaja de 2,6 puntos porcentuales frente al 84,3% obtenido por los hombres.
Igualmente, en el área urbana las adolescentes obtuvieron una tasa de asistencia de 84,8%, cifra que supera en 3,3 puntos porcentuales a la asistencia registrada por los hombres (81,5%). En tanto, en el área rural las adolescentes alcanzan una tasa de asistencia de 65,1% y, representa una ligera ventaja frente a los varones (64,6%).
