(Aeronoticias).- Expertos en telecomunicaciones dicen que la probabilidad de que los teléfonos celulares de los pasajeros puedan ayudar a localizar el avión perdido de Malaysian Airlines es casi nula.
Localizar los teléfonos móviles de las 239 personas a bordo del Boeing 777 que desapareció el sábado no es tan simple como activar la aplicación «Encuentra mi iPhone», dada la velocidad a la que viajaba el avión, su altitud y el hecho de que probablemente estaba volando sobre el agua.
Mucha gente da por hecho que los teléfonos multifuncionales son dispositivos de rastreo con poder ilimitado. A menudo, la policía, unidades de rescate y otros pueden utilizar el teléfono de una persona para determinar la ubicación precisa del usuario.
Aun así, existen grandes porciones del planeta que no tienen las torres de transmisión que son necesarias para las comunicaciones móviles. En el caso del vuelo 370 de Malaysian Airlines, es improbable que los teléfonos multifunciones conduzcan a los investigadores al avión.
A continuación, lo que uno debe saber sobre conexiones móviles y cómo son utilizadas para determinar ubicación:
¿Pueden los proveedores de telecomunicaciones localizar remotamente un teléfono?
Sí, si el teléfono está encendido y está conectado a una red celular o Wi-Fi, dice Ritch Blasi, vicepresidente sénior de comunicación móvil e inalámbrica de la compañía de asesoría Comunicano. Aplicaciones como «Encuentra mi iPhone» sólo funcionan adecuadamente cuando un teléfono es capaz de recibir una señal de localización de un satélite GPS y transmitir esa señal vía conexión celular o Wi-Fi a quienes lo están buscando.
¿Esto cambia cuando uno está en un avión?
Sí, considerablemente. Por un lado, la mayoría de las aerolíneas exigen que los pasajeros apaguen sus teléfonos o al menos los pongan en modo avión antes del despegue. Eso significa que no hay conexión a una red celular, dice Blasi. Aun si algunos pasajeros dejaron sus teléfonos encendidos en el vuelo 370, sería difícil para sus aparatos conectarse a una torre dada la velocidad a la que viajan los aviones y la altitud involucrada.
¿Qué hay del hecho de volar sobre el océano?
Volar sobre océanos reduce aún más las probabilidades de una conexión, ya que sencillamente no hay torres celulares ahí. Charles McColgan, director de tecnología de TeleSign, dice que aunque los investigadores podrían ser capaces de determinar la última torre celular con la que se habían conectado los celulares antes de que el avión comenzara a volar sobre agua, si éste estaba volando en ese momento sobre 10.000 pies (3.000 metros), los teléfonos a bordo no hubieran podido conectarse con una torre
«Quien esté encabezando la investigación debería revisarlo, pero es improbable que la última posición del celular de un pasajero los lleve a encontrarlos», agregó McColgan.
¿Qué pasa si el avión logró chocar en tierra y algunas personas y teléfonos celulares sobrevivieron?
Si alguien pudiera conseguir una señal, en teoría podría realizar una llamada. Pero si el avión cayó en un área remota sin servicio, entonces no tendrían suerte. Además, viajar al extranjero complica las cosas. A menos que una persona contrate servicio de telefonía local en el país a través del cual está viajando, su teléfono quizá no pueda conectarse a una red, dice Blasi, quien trabajó más de 35 años en AT&T antes de convertirse en asesor.
¿Qué hay de las personas que aseguran que llamaron a los teléfonos de sus seres queridos que estaban en el vuelo y dijeron que el aparato sonó varias veces sin una respuesta, en lugar de pasar directamente a correo de voz, indicando que el teléfono pudo haber estado conectado a una red?
Esto no significa necesariamente que el teléfono está conectado a una red, está encendido o incluso en condiciones de funcionar. Sólo significa que el sistema del proveedor de telefonía celular está tomándose su tiempo para buscar el teléfono.
¿Existe alguna esperanza si el avión chocó en el agua y los teléfonos celulares se mojaron?
El agua y los aparatos electrónicos no se mezclan, así que en términos generales, la respuesta es no.
Fuente: www.lavoz.com.ar
Foto: www.lavoz.com.ar