La acción frente al cáncer del llamado ácido gama-linolénico (AGL), una grasa retirada de los aceites vegetales, fue identificada por investigadores del Instituto de Ciencias Biomédicas (ICB) de la Universidad de Sao Paulo(USP), informó hoy este centro académico en su página en internet. Un grupo de investigadores brasileños identificó una sustancia de los aceites vegetales que permite reducir los tumores cancerígenos en el cerebro así como los vasos sanguíneos que los alimentan.
El descubrimiento puede permitir el desarrollo de una medicina para atenuar el glioma, un cáncer agresivo que afecta las células gliares(conocidas como glía o neuroglía), que son células del sistema nervioso que le sirven de soporte a las neuronas e intervienen en el procesamiento cerebral de la información. El glioma es un cáncer que crece rápidamente, invada las áreas saludables del sistema nervioso central y puede causar convulsiones, alteraciones en el habla y parálisis en uno de los dos lados del cuerpo.
Como la enfermedad se multiplica rápidamente en el cerebro, las cirugías para extracción de los tumores casi no son eficaces, como tampoco lo son la quimioterapia o la radioterapia. El estudio de la USP fue realizado por los investigadores Juliano Miyake y Marcel Benediba en un proyecto orientado por la profesora Alison Colguhoun.
La acción del AGL en los tumores cerebrales fue verificada inicialmente mediante un experimento con ratones realizado por Miyake, que cultivó las células tumorales y las inyectó en dos grupos de ratones, que desarrollaron la enfermedad. Los investigadores constataron una significativa disminución del tamaño de los tumores y de sus vasos sanguíneos en el grupo de ratones que fue tratado con dosis diarias de AGL en el cerebro.
«Los vasos sanguíneos reducidos son los que transportan nutrientes y oxígeno que alimentan las células del tumor. Estas células, a su vez,utilizan los vasos para expandirse», según Miyake. Al final del experimento, los tumores de los ratones tratados con AGL eran, en promedio, un 75 por ciento menores que los de los ratones que no fueron tratados con la sustancia y tenían un 44 por ciento a menos de vasos sanguíneos.
«El uso de AGL redujo en 32 por ciento la presencia de una enzima que degrada las sustancias que están entre las células, con lo que abre espacio para el crecimiento del tumor. También redujo la cantidad de proteínas que estimulan a la célula a dividirse», según el investigador. «En un futuro el AGL podrá ser usado para el tratamiento del cáncer de cerebro», asegura el investigador, quien aclara que la sustancia no cura la enfermedad, ya que apenas reduce los tumores.
«Ese tratamiento puede ayudar al paciente a vivir por más tiempo después de descubrir que tiene la enfermedad y tal vez mucho mejor», agrega. Por lo general, los pacientes con glioma mueren un año después del diagnóstico de la enfermedad.
Aeronoticias considera que este adelanto en la medicina por parte del cuerpo médico de investigación brasilero es positivo respecto, a que de potenciarse estos estudios y su aplicación, estamos hablando de lo que parecería una futura cura contra el cáncer, esta enfermedad mortal y hasta el momento sin cura, que se lleva a tantas personas en todas partes del mundo, sin discriminación de edad, sexo ni condición.