El antiguo medio de transporte, mediante el ferrocarril, cobrará actualidad en breve en el Perú con nuevas líneas y modernas locomotoras que enlazarán varias importantes y estratégicas regiones del país, tanto en el norte como en el sur, así como también en una ruta internacional hacia el Brasil, gigante sudamericano que podrá llegar hasta las costas peruanas en el Pacífico.
Se descuenta el gran beneficio que traerán estas vías de fierro a las regiones por donde pasarán los trenes, sirviendo de paso a la integración nacional, figurando entre los proyectos aprobados y que disponen ya de las financiaciones respectivas, el correspondiente al Ferrocarril Norandino; el de la empresa minera Mapsa, que unirá el puerto de San Juan de Marcona, en el departamento de Ica, con la región Apurímac y el ferrocarril Iñapari-Puno, en el departamento del mismo nombre.
Especial importancia tiene el Proyecto Ferrovía Transcontinental Brasil-Perú (FETABP) que una vez terminado impulsará grandemente a todas las ciudades y centros comerciales que atravesarán las locomotoras, transportando además de pasajeros, carga y otras mercancías de uno y otro país, descartándose el movimiento de turistas que podrán desplazarse con seguridad y economía mediante este medio tradicional de transporte.