A pesar de que Irán es uno de los principales exportadores de crudo, carece de la infraestructura necesaria para refinarlo, por lo que necesita importar en torno a un 40% de la gasolina que utiliza.Según algunas estimaciones, el petróleo que ofreció Venezuela podría cubrir el 20% de las necesidades energéticas iraníes.
Como explicó el periodista de la BBC Charles Scanlon, la importancia de este acuerdo comercial radica en la posibilidad de que Estados Unidos y sus aliados decidan imponer sanciones a Irán por su programa nuclear, lo que podría amenazar el abastecimiento energético del país persa. El presidente de EE.UU., Barack Obama, anunció que en este mismo mes finaliza el plazo dado a Teherán para que abandone sus planes de enriquecimiento de uranio.
Chávez, por su parte, dijo que no existe «una sola prueba» de que el gobierno de Ahmadinejad esté fabricando una bomba atómica. El venezolano también se reunió con el líder supremo iraní, Alí Jamenei. Ambos acordaron apoyar los «procesos revolucionarios» en ambos países contra lo que ellos consideran el imperialismo estadounidense.
«Irán y Venezuela deben elevar su actual nivel de cooperación y esforzarse al máximo por fomentar el nuevo frente independiente», dijo el ayatolá, según cita la agencia oficial Irna.
Aeronoticias resalta que, precisamente, Washington ha mostrado su preocupación en los últimos meses sobre la creciente presencia de Irán en la región y el fortalecimiento de los lazos con gobiernos como Nicaragua o Bolivia. «En este caso tiene lecturas más profundas en lo político, ya que se trata de un gesto que va en en la misma línea contra EE.UU. «Es un paso más hacia el estrechamiento de las relaciones» entre ambos países, lo que, para el politólogo, «es motivo de preocupación para EE.UU. y algunos países occidentales en caso de que Irán desarrolle energía nuclear con fines bélicos y la pueda compartir con Venezuela».